A Misa con el Papa Francisco
El nuevo Papa tiene cada mañana
Cada día pronuncia una breve homilía. Hasta el presente no figuran como textos pontificios. Se nos dan resúmenes de las mismas. Los temas responden a las lecturas de cada día con cierta libertad. Son de estructura sencilla y muy familiares. Ejemplo de homilía para los Sacerdotes y de contenido para todos.
UN EJEMPLO POR EJEMPLO.
El cinco de abril, las lecturas relataban el testimonio de Pedro y Juan ante el Sanedrín. Nos invita el Papa a preguntarnos, ¿cómo es nuestra fe? ¿Cómo agua de rosas? ¿Corajudos o tibios?
Afirmación clave: “La fe es como la confesamos en el Credo.”
Frente a esto está la eliminación de lo que no nos agrada. A mí no me gusta el infierno, fuera con él. ¿No comprendo la divinidad de Jesucristo?, tijeretazo que te va. ¿Cómo es posible
“Hay la tentación de hacer un poco como hacen todos, no ser tan rígidos. “Cuando comenzamos a cortar la fe, de cierta forma a venderla al mejor postor, iniciamos el camino de la apostasía, de la infidelidad al Señor.”
El ejemplo de Pedro y Juan es el ejemplo de todos los verdaderos cristianos a lo largo de la historia del Pueblo de Dios. “No podemos callar lo que hemos visto y oído.” “Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres.”
Por esta fidelidad se jugaron la vida los mártires de las Catacumbas y de Coliseo. Y por esta fidelidad se la siguen jugando los mártires de hoy. Cuantos entregan su vida por Jesucristo nuestro Señor.
Terminó el Papa que la fe es un don que debemos agradecer y que debemos vivir con valentía. Vivirla en nuestro ambiente con coraje y sencillez nos traerá inconvenientes, cruz. No hay otro modo de vivir en cristiano.
Otra perla del Papa Francisco sobre el cielo. (25-4)
“Toda la vida cristiana es un trabajo de Jesús, del Espíritu Santo para prepararnos un sitio, para preparar nuestros ojos para ver… nuestros oídos para escuchar. Nuestra alma necesita estar preparada para contemplar el rostro maravilloso de Jesús. Y, sobre todo, preparar nuestro corazón… para amar, y amar mucho… El prepra nuestros corazones con las pruebas, con el consuelo, con las tribulaciones, con las cosas buenas… Es ir preparándose … para llegar a esa patria que es la nuestra.
Pero alguno dice: