De la Compañía de Jesús
DE
¡¡¡BIENVENIDO PAPA FRANCISCO!!!
Para algunos medios de comunicación, vamos de sorpresa en sorpresa con el nuevo Papa. Es posible que pronto se pongan de uñas. Es una alegría que le den a conocer. Gracias a la difusión que el acontecimiento ha tenido, muchas personas se han enterado de la importancia de la nueva elección. Hoy mismo varias personas sencillas me han preguntado por él en transporte público y en
Desde el primer momento tengo la impresión de que estamos ante un jesuita de
Del Papa Francisco espero siempre más porque es el ambiente en que ha formado su personalidad jesuitica. Nos dará muchas sorpresas hacia dentro y desde dentro. A un jesuita formado en los Ejercicios de su padre Ignacio le nace la actividad desde su raíz más profunda. Los Ejercicios, verdaderos, forman personas, no rebaños. Ignacio conquistó jóvenes formidables uno a uno, aunque todos se apoyaban mutuamente.
La ya historia larga de
El Papa Francisco está formado en esta línea. Para mí, lo raro sería que un hombre enamorado de Jesucristo, nacido y criado en los Ejercicios ignacianos se quedara parado. No ha sucedido nunca y no sucederá con el Papa Francisco.
El nuevo Papa no es un activista de una ONG sino un enamorado de Jesucristo que ha asimilado en los Ejercicios textos como estos: “Solamente deseando y eligiendo lo que más conduce para el fin que somos criados.”(23) “Que yo quiero y deseo y es mi determinación deliberada, solo que sea vuestro mayor servicio y alabanza, de imitaros en pasar todas injurias y todo vituperio y toda pobreza, así actual como espiritual, queriéndome vuestra santísima majestad elegir y recibir en tal vida y estado.” (98) “En pasar oprobios e injurias por más en ellas le imitar, solo que las pueda pasar sin pecado de ninguna persona ni displacer de su divina majestad. (147) “Por imitar y parecer más actualmente a Cristo nuestro Señor, quiero y elijo más pobreza que riqueza, oprobios con Cristo lleno de ellos que honores, y desear más de ser estimado por vano y loco por Cristo, que primero lo fue tenido por tal, que por sabio ni prudente en este mundo.” (167) “Para que yo, enteramente reconociendo, pueda en todo amar y servir a su divina majestad.” (233)
No os extrañéis de los gestos que ha hecho este Papa. Lo mejor está por venir. No ha hecho más que empezar.