"Esto sólo lo arreglamos entre todos"…, ¡si el Gobierno se quita de en medio!
por Apolinar
Las Cámaras de Comercio y 18 grandes empresas españolas acaban de lanzar una campaña de marketing, con un presupuesto de unos 4 millones de euros, para promover la idea: “Esto sólo lo arreglamos entre todos”. La iniciativa se presenta como “una llamada a la sociedad civil y desde la sociedad civil, para intentar recuperar esa confianza perdida. Una acción de todos y para todos, para conseguir una actitud positiva que nos ayude a salir de la crisis.”
La frase, en sí, no puede ser más acertada. La economía solo la arreglamos entre todos. El Gobierno solo es un estorbo, cuando no la causa de que “esto” necesite arreglo. España sufre de un endeudamiento elevadísimo, público, privado y de todo tipo, que requerirá austeridad y ahorro por parte de todos, pero sobre todo del Gobierno. También sufre un gran problema estructural de falta de productividad de nuestra economía que solo se arregla dejando libertad a la iniciativa de todos y eliminando las trabas gubernamentales de todo tipo.
¿Es ésta una iniciativa de la sociedad civil para reducir el Gobierno e ir quitándolo de en medio? Por el título, cabría pensarlo, pero parece que la iniciativa no va tanto por ahí. En su opinión, no es el peso asfixiante de un Gobierno intrusivo lo que dificulta que esto lo arreglemos entre todos, sino “una situación de desánimo que la crisis ha provocado en todos nosotros”. Sorprendente.
Se presentan como una iniciativa de la sociedad civil sin filiación política, y nosotros les creemos. Pero es sospechoso que siendo una iniciativa económica de la sociedad civil, no se diga nada, bueno o malo (aunque bueno haya poco que decir), sobre el intervencionismo del Estado en la economía, el principal obstáculo de la sociedad civil para arreglar los problemas solo entre todos. No he visto en la página, pero seguiré buscando, ninguna exigencia a que el Gobierno se limite a asegurar el Estado de Derecho, que no es poca cosa, y devuelva el protagonismo económico a la sociedad civil.
¿Será esta campaña de marketing la versión empresarial y profesionalizada de los titiriteros de la “zeja”?
Javier Gómez-Navarro, ex-ministro con Felipe González y actualmente presidente de las Cámaras de Comercio, junto con los otros portavoces de la iniciativa, Guillermo de la Dehesa, Antonio Garrigues y Miquel Roca, no lo presentan así. Pero aún así, es muy sospechoso el silencio reverencial que se guarda en cuanto a la intervención estéril y esterilizante del Gobierno en la economía.
Esperamos que “entre todos” no se incluyan iniciativas gubernamentales tan estériles y esterilizantes como los 8.000 millones de euros de impuestos gastados, por ahora, en el “Plan E”, la actuación estrella del Gobierno del PSOE para generar empleo y que no ha servido siquiera, como en otros países, para dar un pequeño respiro; aunque sí comparte con el resto de medidas de estímulo fiscal de otros países su capacidad para que a medio plazo las cosas se pongan aún peor.
No esperamos ver en ese “solo entre todos” a un Gobierno hiperactivo en subvenciones, es decir, en su capacidad para sacar el dinero del bolsillo de los que generalmente son productivos para meterlo en el bolsillo de los que generalmente no lo son. Esperamos que el “esfuerzo, compromiso, talento y confianza” que los promotores de esta campaña de imagen quieren no sea para convertir España en un país de “caza subvenciones”, donde la iniciativa empresarial que nos pueda sacar de esto queda esterilizada. Tampoco esperamos ver nuevos privilegios del Gobierno para que las grandes empresas españolas sigan expandiendo sus monopolios sin tener que esforzarse por conseguir una mayor productividad, por proveer mejores servicios y más baratos, como sería el caso en libre competencia, sin privilegios de los Gobiernos a ciertos empresarios.
“Entre todos” solo cabe la clase política para que exprese su compromiso firme de retirar todo intervencionismo estéril y esterilizante de la economía, y su compromiso igual de firme de limitarse a asegurar el imperio de la ley y el orden sobre cualquier interés particular o partidista, algo especialmente necesario para un proceso largo, doloroso y conflictivo que vaya a arreglar esto solo entre todos.
Las actuaciones económicas del Gobierno deben quedar excluidas de “entre todos”, porque, hasta donde yo sé, las iniciativas económicas de los gobiernos solo se reducen a dos: malgastar buena parte de los recursos que nos quita a los ciudadanos y envilecer la moneda, y ninguna de estas dos iniciativas son fuente de riqueza y prosperidad. La función del Estado, claramente, nada tiene que ver con aumentar la productividad o solucionar problemas económicos, por mucho que los teóricos del intervencionismo y de la modelización económica quieran ver las cosas de otra manera.
La productividad, como bien dicen los promotores de la iniciativa, es una tarea solo de los ciudadanos. Tiene que venir de abajo, de todos. De arriba solo viene la acumulación de poder, la corrupción y el empobrecimiento de todos en favor de unos pocos. Desde abajo también vienen ciertas formas de acumulación de poder y corrupción, pero por ser desde abajo y asumiendo que existe el Estado de Derecho, sus efectos son mucho más limitados.
Para que un desastre sea el gran desastre nacional o mundial, como en el que estamos viviendo, no es suficiente las maquinaciones de los especuladores, ni la perversidad de los empresarios, ni la codicia de todos los demás. Es necesario que venga originado desde arriba, por unos poderes públicos con capacidad de gasto de, por ejemplo, el 50% del PIB, como es el caso de España, y la facultad de inflar y envilecer el dinero sin otra restricción que la voluntad política de los gobernantes, como sucede en aquellas economías con banco central “independiente”.
Para que esta iniciativa sea realmente de la sociedad civil y para la sociedad civil, debe ser enérgica en su denuncia de la intervención estéril y esterilizadora del Estado en la economía, aspecto que hasta ahora no he conseguido localizar en su presentación. Porque, efectivamente, “esto sólo lo arreglamos entre todos”, si el Gobierno se quita de en medio.
Apolinar.ReL@gmail.com