Un grupo de 26 pasionistas de Daimiel alcanzaron la palma del martirio en el verano de 1936
Peregrinación a Daimiel (Ciudad Real) para venerar a los mártires pasionistas
Daimiel es una localidad de la provincia de Ciudad Real. Cuenta con una población de 17.629 habitantes y se encuentra a 119 km de Toledo y a 168 km de Madrid aproximadamente. Y a Daimiel se puede peregrinar para venerar los restos de los mártires pasionistas en la Ermita del Cristo de la Luz. Su construcción se inicia en el año 1738, cuando el sacerdote daimieleño don Dionisio de Montealegre consiguió una autorización del Arzobispo de Toledo, don Luis de Borbón, para edificar un santuario y mediante limosnas y ofertorios se reunió el dinero suficiente para el inicio de las obras.
Actualmente es el convento pasionista Santo Cristo de la Luz. Centro de espiritualidad y formación de los padres pasionistas fundados por san Pablo de la Cruz, entre cuyos miembros excelsos figuran además de su fundador: santa Gema Galgani, san Gabriel de la Dolorosa y santa María Goretti. Aquí en Daimiel reposan los restos de los mártires pasionistas que alcanzaron la palma del martirio en 1936.
Este es el exterior y el interior de la ermita:
Bajo el altar mayor una urna con las reliquias de todos los mártires:
Desde el altar se pasa a una sala que conduce a la cripta, en sus paredes los rostros de los mártires, en los distintos grupos en los que fueron asesinados:
Según se narra en la historia de estos martires, cerca de la medianoche del 21 de julio de 1936 los milicianos obligaron a los pasionistas a desalojar su casa. Los treinta y un religiosos se separaron con la esperanza de reencontrarse en Madrid, pero el día 23, seis de ellos, entre los que se contaba el padre Nicéforo, fueron fusilados en el pueblo de Manzanares.
Los demás, hasta un total de veintiséis, fueron asesinados en diferentes lugares hasta el 23 de octubre de 1936. Dieciséis pasionistas contaban entre dieciocho y veintiún años, pues eran recién profesos que estudiaban con vistas al sacerdocio.
Entrando desde el claustro, en dirección a la cripta, nos encontramos con esta lápida:
En la cripta se veneran los cuerpos de los pasionistas martires, beatificados en 1989:
Sobre el altar este relicario para venerar con una reliquia de cada beato pasionista:
Muchas gracias a la comunidad de pasionistas de Daimiel y especialmente al padre Carlos Cano, maestro de novicios, por recibir a los peregrinos, por explicar su carisma pasionista heredado de san Pablo de la Cruz y por ser garante de la memoria viva de los 26 mártires pasionistas que fueron fieles hasta derramar su sangre. QUE RUEGUEN POR NOSOTROS.
Beatos pasionistas de Daimiel mártires en Urda - ReL (religionenlibertad.com)
Madrugada del 25 de septiembre, en Carrión de Calatrava - ReL (religionenlibertad.com)