Misioneros asesinados: En 2009 casi se duplica el número

Como cada año, también al finalizar el 2009 la Santa Sede, a través de la Agencia Fides, ha publicado los nombres de los misioneros muertos en circunstancias violentas durante el año que ha concluido. Se trata de 37 personas, el número más alto de los últimos 10 años. Entre ellos hay 1 laico, 2 seminaristas, 2 religiosas y 30 sacerdotes. Llama la atención el aumento de los misioneros muertos, que en 2008 fue de 20 y en este pasado año prácticamente el número se ha duplicado.

El mayor baño de sangre se ha producido en América Latina, donde han perdido la vida en episodios de violencia 21 misioneros: en Brasil han muerto 6 misioneros, entre ellos uno español y uno italiano; en Colombia han muerto 6; en México 3; en Cuba fueron asesinados 2 sacerdotes españoles; 2 en el Salvador, 1 sacerdote americano en Guatemala; y 1 en Honduras.

África es el segundo continente donde han muerto más misioneros víctimas de la violencia: 4 en Congo; 4 sacerdotes en Sudáfrica, de ellos uno francés y uno austríaco; en Kenia ha sido asesinado 1 sacerdote italiano y otro irlandés; y 1 sacerdote en Burundi.

En Asia han fallecido 2 sacerdotes, uno en India, por odio anticristiano, y 1 en Filipinas. En Estados Unidos han fallecido dos misioneros, una religiosa en Nuevo México y un sacerdote en New Jersey. Y en el dramático ranking, Europa ocupa el último lugar, con el sacerdote francés Louis Jousseaume, asesinado por un enfermo al que cuidaba.

Esta son las estadísticas, que pueden parecer frías, pero van acompañadas por nombres y apellidos concretos, entre los cuales podemos destacar los siguientes:

P. Giuseppe Bertaina, misionero italiano de la Consolta, tenía 81 años de edad y fue asesinado en Kenia, donde llevaba trabajando más de 40 años, el 16 de enero de 2009 por unos ladrones que entraron a robar en el Instituto de Filosofía de la Consalata en Nairobi, Kenia.

P. Eduardo de la Fuente Serrano, sacerdote diocesano español de 59 años de edad, fue asesinado en Cuba el 14 de febrero de 2009. Incardinado en la diócesis de Alcalá de Henares, llegó a Cuba en el año 2006 y trabajó como párroco de la comunidad de Santa Clara de Asís, se distinguió por su celo apostólico, su caridad y su marcada preferencia por los pobres.

P. Juan Gonzalo Aristizábal, sacerdote colombiano fue asesinado el 22 de febrero en la ciudad colombiana de Medellín. El cuerpo fue encontrado en su vehículo cerca de la Universidad de Antioquía. Era un sacerdote muy querido en su región por las labores sociales y las obras de caridad que llevaba a cabo con los más pobres.

P. Daniel Matsela Mahula, sacerdote sudafricano de 34 años de edad, fue asesinado por unos ladrones que asaltaron su coche en Bloemhof,  diócesis de Klerksdorp, Sudáfrica el 27 de febrero.

P. Revócat Gahimbare, sacerdote burundés, fue asesinado el 8 de marzo, cuando intentó defender a las religiosas del Convento de Bene Maria, de unos ladrones que habían asaltado su residencia.

P. Lionel Sham, de 66 años de edad, párroco de Mohlakeng, de la arquidiócesis de Johannesburgo, Sudáfrica, el 7 de marzo, después de haber sido secuestrado en casa parroquial.

P. Gabriel Fernando Montoya Tamayo de 40 años y P. Jesús Ariel Jiménez de 45 años, Religiosos Redentoristas, fueron asesinados el 16 de marzo por un desconocido en el Internado indígena del municipio de La Primavera, Vichada en Colombia.

P. Ramiro Ludeña Amigo, misionero español de 64 años natural de Toledo, asesinado el 19 de marzo en Recife, Brasil. El misionero, que trabajaba desde hace 34 años en el país carioca en favor de los más desfavorecidos, especialmente con los niños de la calle, fue tiroteado el jueves por la noche cuando se disponía a salir con su vehículo de un estacionamiento. La policía ha detenido a un joven de 15 años como sospechoso del asesinato.

8 cristianos asesinados en diferentes ciudades de Irak durante en mes de abril. Se cree que fueron homicidios premeditados por motivos religiosos y por la situación de persecución religiosa que sufren los cristianos en el país con la intención de obligarles a abandonar el país. También fue asesinado un niño cristiano en el distrito de Sheykahn el 12 de mayo.

Raj Anthonipillai Uthayaraj, laico trabajador de Cáritas en Sri Lanka, falleció en la primera semana de mayo, a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y los tigres tamiles que se están librando en el país.

P. Lorenzo Rosenbaught, Misionero Oblato de María Inmcualda, norteamericano de 74 años fue asesinado el 19 de mayo en la región de Ixcan, Guatemala cuando unos ladrones asaltaron el coche en el que viajaba con otros misioneros.

2 laicas católicas muertas el 23 de mayo al explotar una bomba en la iglesia de la Asunción en Kathmandú, Nepal. La bomba explotó en el templo cuando más de trescientas personas se encontraban orando. El atentado ha sido reivindicado por un grupo radical hindú.

P. Ernst Plöchl, misionero austriaco de 78 años de edad de los Misioneros de Mariannhill, fue asesinado en la misión de Maria Zell, de la provincia de Jefe en Sudáfrica. No están claras las circunstancias de su muerte pero parece que fue asesinado en su casa para robarle, y fue allí donde le encontraron muerto la mañana del domingo 31 de mayo.

P. Habacuc Hernández Benítez, sacerdote mexicano coordinador de la pastoral vocacional de la diócesis de Altamirano, Eduardo Oregón Benítez y Silvestre González, seminaristas, fueron asesinados cuando se dirigían a una reunión pastoral vocacional, en Arcelia, Guerrero, México, el 13 de junio.

Jorge Humberto Echeverri Garro, catequista colombiano fue asesinado por un grupo guerrillero en Colonos, Colombia. El catequista estaba en una reunión pastoral con la comunidad cuando el grupo guerrillero asaltó el recinto se llevó al catequista y le asesinó el 14 de junio.

P. Gisley Azevedo Gomes, misionero Estigmatino brasileño, encargado del Departamento de Juventud de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, fue asesinado en una localidad cercana a Brasilia, Brasil, el 15 de junio, por unos desconocidos que asaltaron su coche quizás para llevar a cabo un secuestro.

P. Mariano Arroyo Murillo, misionero español natural de Santander fue asesinado el 13 de julio, en su casa parroquial de Regla, un pueblo a las afueras de la Habana. Se cree que el móvil del asesinato fue el robo y que no se debe a ningún tipo de motivación ni persecuión política ni religiosa.

P. James Mukalel, sacerdote católico de 39 años de la diócesis siro-malabar de Betlthabgady, fue asesinado el 29 de julio, en Mangalore, estado de Karnataka, India. Su cuerpo fue encontrado en una carretera cercana al pueblo en el que había celebrado un funeral por un parroquiano de esa localidad.

P. Leopoldo Cruz, sacerdote redentorista salvadoreño fue encontrado muerto el 24 de agosto en un canal de una zona rural del país. El sacerdote estaba desaparecido desde hacía unas semanas. No se pueden establacer las casuas de la muerte pero pocos días después de encontrar su cadaver se detuvo a un joven que conducía el coche del sacerdote, por lo que se intuye que el motivo del asesinato fue el robo.

P. Cecilio Lucero, sacerdote filipino, asignado a la parroquia de San José en la diócesis de Catarman, Filipinas, y director del Social Action Center, un centro dedicado a la defensa de los derechos humanos, fue asesinado el 6 de septiembre por un grupo de hombres armados que asaltaron el vehículo en el que viajaban.

P. Ruggero Ruvoletto, misionero italiano Fidei Donum, fue asesinado el 19 de septiembre en su parroquia de Santa Evelina en la periferia de Manaos en el Nordeste de Brasil. La policía ha hablado de un posible de robo.

P. Evaldo Martiol, sacerdote brasileño de 33 años fue asesinado el 26 de septiembre por dos hombres que le asaltaron para robarle en la localidad de Santa Catalina, diócesis de Cacador en Brasil.

P. Óscar Danilo Cardozo Ossa, sacerdote colombiano, párroco de San Luis María de Montfort, Villavicencio, Colombia fue encontrado muerto el 27 de septiembre en su casa con signos de estrangulamiento. Se desconocen los motivos del crimen.

William Quijano, joven salvadoreño de 21 años de edad, perteneciente a la Comunidad de San Egidio, fue asesinado la tarde del 28 de septiembre cuando regresaba a casa, por una "banda" de jovenes violentos del lugar. William estaba comprometido desde años en la ´Escuela de la Paz´ que la Comunidad de San Egidio tiene en la zona al servicio de los niños pobres.

Hna. Margaret Bartz, religiosa estadounidense de las Sisters of Blessed Sacramente for Indians and Colored People, que trabajaba entre los indios navajos, fue hallada muerta en su convento de Nuevo Méjixo, Estados Unidos, la noche del 31 de octubre de 2009. La policía baraja el movil del robo porque su coche ha desaparecido.

P. Hidalberto Henrique Guimaraes, sacerdote brasileño, párroco de Nuestra Señora de Gracia, en Murici, Brasil, fue apuñaldo y golpeado hasta morir el 7 de noviembre de 2009 en el interior de su casa.

P. Jean Gaston Buli, sacerdote congoleño, fue aseisnado en su parroquia de Nyakasana, Bunía, República Democrática del Congo por unos ladrones que asaltaron su casa la noche del 9 de noviembre de 2009.

P. Miguel Ángel Hernández, sacerdote guatemalteco, parroco de la Iglesia de San José en Ocotepeque, que había desaparecido durante un viaje pastoral a Chiquimula, fue encontrado asesinado el 11 de noviembre de 2009.

P. Daniel Cizimya, sacerdote congoleño, fue asesinado la noche del 5 de diciembre por hombres armados no identificados que habían entrado en el presbiterio de su parroquia de Kabare, Bukavu, República Democrática del Congo.

P. Louis Blondel, misionero Padre Blanco de 70 años de edad, fue asesinado el 6 de diciembre en su residencia de la parroquia de Diepsloot, uno de los barrios más pobres de Johannesburgo, Sudáfrica. Conocido por su labor entre los más pobres, fue asesinado por unos jóvenes de la localidad que entraron a robar en la paroquia.

Hna Denis Kahambu, religiosa trapense fue asesinada en un ataque a su monasterio en Bukavu, República Democrática del Congo el 8 de diciembre de 2009.

P. Jeremiah Roche, misionero de la Sociedad Misionera de San Patricio, fue asesinado en su casa de Kericho en Kenia el 11 de diciembre de 2009, se cree que el motivo de su asesinato fue el robo.

P. Alvino Broerin, sacerdote brasileño fue apuñalado por unos ladrones que intentaron robarle en plena calle y murió el 14 de diciembre de 2009 a consecuencia de las heridas.

Una vez más, esperemos que la sangre de los mártires siga siendo semilla de nuevos cristianos en el año que comienza.