¿Se puede ser progresista sin tener que ir en contra de la vida?
La respuesta debería ser obvia, el defender posturas progresistas no debería estar reñido con el ir a favor de la vida, es más, debería incluir el defender la vida. Esta es la teoría, que vemos aplicar en muchas partes del planeta y por mucha gente progre de buena voluntad. Pero da la casualidad que en nuestro país es prácticamente imposible. Es verdad que a muchos progres se les llena la boca con los derechos humanos y lo importante que es la vida, pero a la hora de la verdad no es cierto, siento decirlo. No es cierto, porque les interesa defender la vida según y cómo, no lo aplican a todas las vidas: Por supuesto, las de los animales son todas valiosísimas para ellos, pero cuando se trata de seres humanos la cosa cambia. Hemos presenciado cómo la huelga de hambre de la Saharaui Haidar ha conmovido con razón a media España, incluyendo a todo el progresío cinematográfico, folklórico y político. Pero si se tratase la madre de un activista cubano encarcelado, habría que ver cuántos de todos ellos habrían ido a solidarizarse con ella. Alguno habría ido, no digo yo que no, pero la inmensa mayoría lo dudo mucho.
Y por hablar de casos más sangrantes, para el progresío la vida del no nacido no tiene valor si no le viene bien a la madre (el padre, como si no existiese), y si se trata de un niño con posibles malformaciones, no hay ninguno que daría dos duros por él. Con aires de experta la ministro de igualdad hace meses decía que el feto de 13 semanas no era ser humano y que el de 14 ya empezaba a serlo. Pues bien, como se suele decir, "donde dije digo, digo Diego" de pronto por un puñado de votos de los partidos radicales, el feto deja de ser humano hasta las 22 semanas. Tamaña desfachatez nunca se vió antes, pero no es para extrañarse, en el fondo es una muestra más que para el progresío la vida humana vale según y cómo. Por otro lado, ninguno que se precie de moderno en ciertos ambiente de este país se atreve a hablar en contra del aborto, sopena de ser calificado de carca o semicarca, o de carca encubierto de progre.
Es una pena la escasa capacidad de autocrítica y pensamiento libre que tienen algunos. Y sin embargo, hay casos en otros lugares que a uno le llenan de admiración. Me refiero al senador norteamericano Ben Nelson, que ha saltado a los medios de comunicación por algo muy loable. Desconozco si es católico o no, lo podría buscar en la Wikipedia pero no tengo tiempo para ello. No sé si es buena persona o no, si está casado o divorciado, si es buen político o malo, pero lo que sé es que ha hecho algo admirable. Es del partido demócrata, que en Estados Unidos son los progres, esto es, los que defienden a los inmigrantes, el ecologismo, las libertades, etc., aunque la política americana no se puede comparar facilmente con la española.
Pero bueno, este senador por Nebraska es progresista moderado y defiende políticas sociales, pero a la vez es antiaborto y como Obama necesitaba su voto para aprobar en el senado la reforma de la sanidad que tanto ansía (y que me parece muy bien, aunque al final ha quedado un poco desnatada), pues el senador se lo ha puesto difícil y entre las condiciones que ha exigido ha sido la restricción al máxino de la financiación de abortos con dinero público. Ha pedido también otras cosas, no pensemos que es una hja de la caridad, pero ha tenido las agallas de defender algo con tanto sentido común como que no se paguen abortos con dinero público (como estamos haciendo nosotros cada día).
Pues felicidades al senador Nelson, al menos por esta movida, ya que no conozco otras actuaciones suyas. Si a eso se suma que muchos otros miembros del mismo partido demócrata (el progre) defendieron la misma postura en el congreso, los americanos pro life pueden tener esperanza de no pagar abortos con su dinero, en la nueva reforma médica americana. Una vez más la desfacahatez del progresismo español contrasta con los "signos de los tiempos" que nos llegan de otros países, que poco a poco se van cansando de lo que aquí gusta a muchos.