Con Carmen, la joven a la que entrevisté antes de ir a la JMJ de Madrid
Me encuentro de nuevo con Carmen, la joven a la que ya tuve el gusto de entrevistar el pasado 6 de julio, por dos motivos principales: se trataba de su primer encuentro con el Papa (la primera JMJ a la que asistía), y que estaba justo en el límite de edad necesario para la participación plena en tal evento: 14 años.
Antes que nada, Carmen, ¿has podido descansar un poco después de tanta actividad que te ha supuesto la JMJ?
Gracias por preguntar, todavía tengo que recuperar un poco de sueño. Lo que más nos cansó fueron los cambios de temperatura. Yo creo que Dios nos ha puesto a prueba con el calor de la mañana, con el frío y la lluvia de la noche, para que a pesar de todo sigamos “firmes en la fe”, como bien dice el lema de esta jornada. Porque sin Él no habría sido posible aguantar tanto.
Si tuvieras que resumir en una frase tu experiencia o testimonio acerca de la JMJ, ¿cuál sería?
Yo personalmente he ganado más confianza en Dios, y me he dado cuenta de que así nunca me va a faltar nada.
De entre todas las vivencias que has tenido, díme cuál ha sido para tí la más:
1) Bonita: El Via Crucis fue algo precioso, hasta el Papa se emocionó.
2) Impresionante: Darme cuenta de la cantidad de gente que no solo hay en España si no en el mundo entero, que comparte mis mismas creencias. Es decir, que no me encuentro sola.
3) Curiosa: Antes de la adoración, en la vigilia de Cuatro Vientos empezó a llover, pero cuando salió la custodia, y mientras la oración, paró y cuando terminó la adoración volvió a llover. Todos nos quedamos mudos, fue además de una cosa curiosa, extraordinaria.
4) Graciosa: Cuando el Santo Padre al ver a los niños con disfraces de la guardia suiza, les dijo: - ¡habéis empequeñecido¡
Acerca de tu impresión acerca del Papa: ¿cómo ha sido tu primer encuentro con él y el de la última celebración tenida en Cuatro Vientos?
Sinceramente yo veía a este papa más aburrido que el anterior, y aparte de que ya que es beato Juan Pablo II, me parecía muy difícil superar o igualar la situación. Pero nada de eso, me he dado cuenta que también es extraordinario. Porque cuando hablaba, no habla a los jóvenes en general, te habla a ti, como persona con un futuro por delante. Podemos observar esta postura desde la homilía de Cuatro Vientos. Me parece que el Santo Padre se ha esforzado y ha disfrutado al máximo con la edad que tiene: ahora una misa aquí, un discurso allá... La verdad es que se ha portado como un joven más, porque podría haber suspendido la vigilia por la lluvia y el viento, pero siguió allí con nosotros y con Cristo, hasta el final. Después de eso, me sentí muy orgullosa de vivir con Papa así.
¿Qué le dirías a estos tipos de jóvenes al regresar a tu vida ordinaria..
1) A uno/a que haya asistido contigo a la JMJ:
Compartiría con él/ella nuestras experiencias, e intercambiaría opiniones y puntos de vista.
2) A algún/a amigo/a que no haya podido ir aunque hubiera querido:
Que ha sido una pena que no haya ido, y le contaría todo lo bueno y lo malo de la experiencia.
3) A alguien que no haya querido ir y que hubiera pasado del asunto:
Que no sabe lo que dice ni lo que se ha perdido. Porque la mayoría de la gente piensa que la Iglesia es aburrida. Le enseñaría fotos de lo bien que nos lo hemos pasado en los conciertos, rezando, y con el agua refrescándonos.
Por último, ¿cuáles han sido las palabras del Papa que más han calado en ti y cómo crees que vas a llevarlas a cabo en tu vida diaria como la misión que piensas te corresponde según tu edad y posibilidades?
- Cuando repitió varias veces: “La Iglesia está viva”. Porque tiene mucha razón, aunque la Iglesia joven parezca muerta porque no se encuentra a muchos jóvenes en la misa, eso no significa que esté muerta.
- Creo que cada uno podemos realizar esta misión dando ejemplo como jóvenes en nuestros pueblos, comunidad, colegio, clase e incluso en nuestro propio grupo de amigos. Dando a conocer que no estamos muertos sino vivos, que somos felices creyendo en Dios, y que gracias a eso somos felices y vivimos con alegría y VIDA.