«Campeonex» y Red Madre

Una nueva película en torno a la discapacidad intelectual ha sido recientemente estrenada. Su título, Campeonex. Su director, Javier Fesser. La temática que aborda ya lo fue en el éxito de taquilla Campeones, del mismo director, con algunos de los mismos actores que la nueva, como Jesús Vidal, Gloria Lago, Sergio Olmo, Jesús Lago Salís, José de Luna, Fran Fuentes, Alberto Nieto, Roberto Chinchilla y Stefan López.

Ya entonces fue mucho y bueno lo que se comentó aquí en ReL acerca de lo que se dijo sobre el colectivo de personajes implicados y lo sorprendente del fenómeno del aborto provocado, en el sentido de que muchas de las personas que manifestaban un cierto grado de arrobamiento por lo representado en la película eran al mismo tiempo defensoras del aborto, esto es, en sentido estrictamente biológico, de la brutal finalización de la vida de un ser humano en el vientre de su madre, en muchas ocasiones por la sospecha de que pudiera tener algún tipo de malformación, síndrome de Down, etc. El productor, Álvaro Longoria, recibió hasta un premio Bravo de la Conferencia Episcopal Española precisamente por lo que de antiabortista podía tener la película.

Pues se me antoja que eso no fue nada comprado con lo dicho por el director de Campeonex en las entrevistas realizadas en la promoción de la película actual:

-"Necesitamos que las personas con capacidades diferentes estén en la sociedad".

-"Espero que la película ayude a que las personas con capacidades diferentes se vayan incluyendo en la sociedad al 100%. Y se incluyan por la necesidad de la sociedad. Necesitamos la mirada de todos".

-"En nuestra sociedad nadie puede negar que nos hace falta urgentemente dosis de sinceridad, de buen rollo, de generosidad, de falta de ego... Una serie de cosas que se me ocurre que traerían de serie estas personas con discapacidad intelectual".

-"Las personas con discapacidad intelectual no trabajan la mentira, ni el engaño, ni la falta de honestidad: son características que a la sociedad le vendría bien incorporarlas. Son cosas que no vienen en su sistema operativo".

-"Porque hablamos de personas que tienen una mirada llenas de cosas de las que aprender".

-"La incorporación al equipo de un personaje con discapacidad funcional abre el abanico de la discapacidad, de la diversidad y de las grandes capacidades para emocionar y para tirar p'alante y sonriendo".

-"Y ese retrato más amplio de discapacidad, donde ya no solamente vemos el día a día de nuestro equipo, sino también el de sus familias, los centros, sus relaciones sentimentales, la gestión de cosas como la pérdida, el perdón… son temas mucho más profundos que la película está contando y desarrollando visualmente. Todo es más ambicioso y más grande en este CampeoneX".

-"Lo bueno del mundo virtual es que es un universo paralelo donde desaparecen las etiquetas, desaparece tu silla de ruedas, desaparece tu falta de capacidad para hablar... Ahí hay un universo por explorar que es superinteresante. Buscando a este nuevo personaje, que en nuestra historia es un gamer experimentado y exitoso, tuvimos la suerte de que la vida nos lleva hasta Brianeitor, que es todo eso y más".

-"Es una persona con una discapacidad funcional de casi el 90%. Pero a nivel de cabeza, ya me gustaría ser la mitad de listo y brillante que Brianeitor. Y aporta a la película esa verdad que tiene, que realmente es un crack de los videojuegos. En cuanto nos dijo que sí reescribimos el guión para adaptarlo a él".

-"Son veteranos, pero no ejercen como tales. Creo que siguen igual de permeables, igual de inocentes, igual de ingenuos, igual de curiosos y, sobre todo, igual de generosos. Porque la película no solamente habla de aceptar a todas las personas como son y, por lo tanto, de aceptarnos a nosotros mismos. Sino también de esa capacidad enorme que tienen los Campeones de adaptarte a lo que sea".

-"Porque todos los protagonistas comparten una característica fundamental que es la curiosidad, la atracción... el querer conocer y aprender cosas nuevas. No tienen ningún miedo a lo desconocido. Empiezan siendo un equipo de baloncesto de sobrada reputación y, de repente, de la noche a la mañana, un golpe de mala suerte los convierte en un equipo de atletismo. Y todos lo ven como una gran oportunidad, no como la desgracia que podía haber sido. Es otra de las lecciones nuevas de estos personajes: que no saben lo que es el atletismo, pero van a por todas, a disfrutar a tope de esa nueva experiencia".

Preguntado Fesser qué ha aprendido de ellos, contestó: "¡Sobre todo, la idea de que nada es imposible! También he aprendido a aceptarme mejor a mí mismo, a aceptar mejor todas mis taras, todas mis limitaciones... que son muchas. Todos las tenemos. Pienso que usaba demasiado mi capacidad intelectual para disimular esas limitaciones que tengo. Y cuando veo que estas personas se aceptan a sí mismas con tanta alegría y con tanto orgullo, eso se contagia, porque ves que da resultado. Creo que cuando aprendes a aceptar a los demás como son, la primera consecuencia es que empiezas a aceptarte a ti como eres; y eso es un camino buenísimo hacia la felicidad".

Es inevitable recordar las palabras en el mismo sentido de Alexia, a quien el mismo director dedicó la desafortunada película Camino, que la familia de la niña no dudó en calificar de tergiversadora de su historia real: "Tengo doce años y soy la séptima de mis hermanos. Doy muchas gracias a Dios de haber nacido en una familia donde todos se pusieron muy contentos cuando yo nací. Si mi madre hubiera sido una de esas que quieren matar a sus niños antes de nacer, yo no habría nacido. Me gustaría decirles que no los maten, por favor, porque seguro que alguien adoptaría a esos niños. En nuestra casa seguro que recibiríamos encantados a uno de esos niños que no los quieren" (Alexia González Barros).

Y podríamos seguir… todo un argumentario para uso en las puertas de negocios como ciertas clínicas, o a emplear en organizaciones a las que tanto debemos y tantos deben incluso haber nacido, como Red Madre. Sin que ello signifique promocionar sin más una película que hace algún lamentable guiño a la ideología de género.