El principio del fin

Desde hace muchos años me preguntaba a mí misma si vería con mis ojos el fin del aborto y siempre he tenido la impresión de que así sería, y pienso que estamos asistiendo al principio del fin de este inmenso crimen del aborto, el mayor en toda la historia de la humanidad, las murallas de Jericó han empezado a derrumbarse.

Lo que pasa en EEUU se transmite a todo el mundo y, a pesar de que hay otras potencias emergentes, lo cierto es que sigue siendo la potencia dominante que impone su ley y su ideología a base de dinero principalmente. A través de la sentencia de Roe vs Wade, que fue una artimaña y una aberración, incluso desde el punto de vista jurídico, y de la financiación a través de las grandes fortunas el aborto, se ha exportado al resto del mundo. Ahora con la derogación de esta sentencia el círculo vicioso de la muerte puede convertirse en círculo virtuoso de la vida y el efecto dominó nos llegará, espero que más pronto que tarde.

De cómo se ha logrado esta gran victoria creo que hay que sacar algunas enseñanzas:

La primera es el día en que esto sucedió, el día del Sagrado Corazón de Jesús y la fiesta de San Juan Bautista aunque se trasladó al día anterior. Para mí fue un inmenso regalo de cumpleaños dicho sea de paso.

La victoria es de nuestro Dios y de su Sacratísimo Corazón. Del Viernes Santo, que fue verdaderamente la hora de las tinieblas, viene la Redención y la Resurrección y de esta cultura de la muerte triunfarán y reinará el Sagrado Corazón de Jesús. La victoria no es nuestra ni está en nuestras manos alcanzarla, pero si lo está colaborar, nuestra es la lucha, suya la victoria.

Es también importante mirar a San Juan Bautista, precursor del salvador y al que recordemos cortaron la cabeza por ser políticamente incorrecto e intransigente y decirle a Herodes que con la que vivía no era su mujer y estaba en adulterio.

La segunda es que la soberbia lleva a la perdición. Los malvados hacen muchos planes, y se salen con la suya muchas veces, son poderosos, pero no son omnipotentes. Siempre la perdición de todos los que en tantas ocasiones han intentado imponer sus macabros planes a la humanidad ha sido la soberbia, intentar abarcar demasiado, venirse arriba y apretar el acelerador demasiado deprisa, creerse invencibles. Como dice el salmo "al exhalar el espíritu, vuelven al polvo, y en ese día perecen todos sus planes". Pienso que los abortistas se han quitado la careta completamente, que han ido muy lejos pidiendo el aborto aun después del parto, persiguiendo la objeción de conciencia y a los provida, aprobando leyes cada vez más diabólicas y demenciales y quizá gracias a Dios esta radicalidad ha hecho abrir los ojos a muchos de que esto no va de derechos de nadie, sino de la maldad y ambición de los poderosos.

La tercera es el camino seguido por los provida en los Estados Unidos. Muchas enseñanzas podemos obtener de ellos, pero señalemos solo algunas:

• Votar a candidatos provida:Los jueces que han revocado la sentencia fueron puestos por el demonizado Donald Trump, el hombre que más ha hecho por la lucha provida en los Estados Unidos y quizá por eso tan calumniado y demonizado. Hay que votar a candidatos provida, no vale el mal menor, no me vale que hay que tener en cuenta la economía, no vale ninguna otra excusa: candidato que no defiende los principios innegociables que Benedicto XVI expuso no se le vota, y menos si va de falso católico.
• Importancia de la lucha legislativa: Hay que dar la batalla también en los tribunales. Hemos visto en otras cuestiones como leyes y normativas verdaderamente lesivas de los derechos humanos durante la pandemia se han echado atrás por la denuncia en los tribunales.
• Diversidad de carismas en el movimiento provida: El movimiento provida en América siempre ha sido en gran medida religioso, las grandes asociaciones son católicas y protestantes aunque por supuesto que también hay “ateos por la vida”. Todos son bienvenidos, unidad en la diversidad, pero respetando esa diversidad. La Iglesia en EEUU también está muy involucrada en la lucha provida en distintos ámbitos.

Esta victoria es fundamental, pero el camino aún es largo, la sentencia no significa siquiera la prohibición del aborto en los EEUU, sino que deja libertad a los estados.

En España y en casi toda Europa aún estamos en el otro lado del péndulo, siguen radicalizándose las leyes abortistas, pero esto es justamente su perdición, la cuerda está a punto de romperse de tanto tirar. Tenemos razones para la esperanza, la victoria del Sagrado Corazón de Jesús.