Cataluña y la Nueva Evangelización: algo se mueve

Acabo de llegar de pasar cuatro días de intenso trabajo en Cataluña junto con mi equipo del Curso Alpha que han dejado un muy buen sabor de boca.

El motivo de la visita era dar el día de Misión 2013 de NOTEMO, un espacio joven de evangelización que tiene lugar en la hermosa parroquia de la Milagrosa todos los sábados por la noche en Barcelona.

Aprovechando la visita hicimos una parada "ad limina" en Solsona donde disfrutamos de la calidez y acogida de una diócesis que está abriendo caminos de Nueva Evangelización y siendo ejemplo para toda la Iglesia en España. A monseñor Novell le gusta decir que ellos son los japoneses de la evangelización,  todo lo que funciona lo copian, no se inventan nada.

Por eso hacen Alpha, el oratorio de los niños del P. Carbó, Tornar a Creure, participan en el ENE (Encuentro de Nueva Evangelización),  se van a Toulon, a Milán, se ponen a conocer las escuelas de San Andrés, y muchas otras cosas, pero no de cualquier manera.

En lo que nos toca, que es Alpha, son únicos pues están llevando a cabo un plan sistemático que abarca a toda la diócesis, con la ambición de reedificar comunidades parroquiales entorno a una experiencia de primer anuncio y el acompañamiento que lo sigue.

Tras Solsona nos fuimos a Barcelona donde nos dividimos, unos para asistir al equipo de un curso Alpha que empezaba en la Concepción de manos de los Christifideles Laici, y otros para disfrutar del equipo de LIFETEEN de Tarrasa. Nuestros amigos de la parroquia catedralicia reúnen a un grupo de casi cien jóvenes todos los viernes en torno a un programa de catequesis evangelizadora  a siete años que quiere ser 100% fiel a la Iglesia y 100% fiel a la cultura.

Como mucho de lo que funciona hoy en día en evangelización es algo que viene de fuera, y está presente en todo el mundo.

El sábado fue el día más intenso con diferencia pues estuvimos dando el día de Misión para los de NOTEMO;  entre col y col hicimos una escapadita a a ULLAN (Una Luz en la Noche en versión catalana) donde pudimos ver a más de cincuenta jóvenes de todo tipo de realidades eclesiales dispuestos a evangelizar por la Ramblas.

Ya de vuelta a NOTEMO acabamos con una vigilia de oración ante el Santísimo pidiendo que ocurriera un Nuevo Pentecostés, que se remató con la Eucaristía dominical que presidió nada menos que el Cardenal Sistach a quien tuvimos ocasión de saludar.

Todos sabemos que en Cataluña la descristianización es enorme, y sorprende por tanto ver tanta gente haciendo cosas e intentando ponerse en sintonía de evangelización.

Personalmente desde la perspectiva que da nuestra relación ya de años con Solsona y cosas que ha abierto brecha como el I Congreso de Nueva Evangelización de Manresa en 2012, lo que tengo clarísimo es que Dios está bendiciendo a través de todas esas personas que perseveran en medio de una sociedad secularizada y en gran medida anticristiana.

En Barcelona también ocurren muchas cosas, y para mí ha sido siempre fuente de inspiración y de gracia desde que empecé a frecuentar grupos de Renovación cuando tenía la suerte de poder ir por allí.

Yo no sé cómo encajarán todas estas piezas en el puzle de la Nueva Evangelización, pero lo que sí tengo claro es que algo se mueve en Cataluña y de ahí pueden venir muchas sorpresas; es un privilegio asomarse a la ventana por unos días y poder ver parte de lo que está sucediendo.

Desafíos hay muchos, todos los conocemos y quizás el primero es conseguir que lo que ocurra sea algo integrado y compartido por tantas comunidades y personas que llevan tiempo dando la batalla y a lo mejor no están tan acostumbradas a unir fuerzas.

La batalla de la Nueva Evangelización, estoy convencido, empieza por algo tan fundamental como la unidad de los propios católicos, que han de hacer frente común y dar lo mejor de cada uno para que Cristo sea anunciado.

Por dónde seguirá, depende de Dios, y a buen seguro que a poco que le dejemos, los frutos serán abundantes y evidentes…