En la muerte de Vicki Thorn, fundadora de Proyecto Raquel
por Cuestión de vida
Contar la historia de Proyecto Raquel con Vicki Thorn es contar la historia de mi vocación, la historia de mi vida y la historia de la fundación de Spei Mater. Pero sobre todo la historia de una autentica revolución en la pastoral y en la defensa de la vida que cambio todo y a todos.
Solo estuve con Vicki personalmente dos veces, la semana que pase con ella casi 24 horas al día durante las jornadas de Proyecto Raquel en España en el 2010 y en otra ocasión en que vino a Madrid a participar en un congreso, pero ella me cambio completamente la vida a mí, a todas las consejeras de Proyecto Raquel de Spei Mater y a todas las personas atendidas por Proyecto Raquel, que en estos más de 10 años son muchas, muchísimas.
Pero no solo ha cambiado la vida de tantas y tantas personas, ha cambiado en enfoque de la pastoral de la vida en España y creo que en gran parte del mundo. Y es que tengo el convencimiento absoluto de que Proyecto Raquel es una obra y una genialidad de Dios. Hasta ese momento todas las acciones provida se habían centrado básicamente en el rescate del bebé en peligro de ser abortado, pero Proyecto Raquel pone su foco en otro sitio, en la destrucción que aborto provoca en la vida de todas las personas tocadas por él, en la madre, pero no solo en ella, sino en el padre, en los abuelos, en los sanitarios.
Durante mucho tiempo se acusó a los provida y a la Iglesia de que se preocupaban del bebé y no les importaba la mujer. Esto siempre fue falso evidentemente, pero ¿qué argumentar ahora que ya no hay bebé que salvar y que la persona ya ha abortado? Pues que la Iglesia sigue siendo madre y que lejos de condenar y rechazar a estas personas, las acoge y las reconcilia sin minimizar la gravedad del hecho.
Proyecto Raquel bebe de la Divina Misericordia, por eso creo que Vicki ha muerto tan cerca de esta gran fiesta de la Iglesia que inspiro Proyecto Raquel. Y es que la Divina Misericordia es la gran tabla de salvación que Dios nos ofrece en este mundo herido y sin rumbo cada día más distópico y apartado de Dios. Dios no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y que viva y nos abre las puertas de la Misericordia, resucitando tantas almas sufrientes y muertas en vida.
Proyecto Raquel revolucionó la pastoral de la vida en España, que hasta esa fecha y salvo excepciones estaba en gran parte delegada en asociaciones aconfesionales y centrada en la ayuda material. Benedicto XVI nos dijo “la pastoral de la vida es la pastoral de la misericordia” y este es el nuevo y providencial enfoque que fue calando.
Proyecto Raquel revolucionó el concepto de ayuda, porque nuestra misión como Iglesia no es principalmente la ayuda material, que por supuesto también hay que darla cuando se necesita, pero el centro de nuestra misión es la sanación de las heridas, también el Papa Francisco nos ha hablado en este sentido, y el anuncio del Evangelio.
Proyecto Raquel fue la inspiración principal del Spei Mater, cuyo carisma es ser el rostro de la misericordia para las víctimas de la cultura de la muerte, entre ellas, de una manera especial y destacada a las víctimas del aborto provocado a través del Proyecto Raquel.
A la muerte de Vicki a la que tanta admiración y cariño tengo, y considero una madre, como a Magaly Llaguno, otra revolucionaria de la defensa de la vida, nos queda un gran hueco en nuestros corazones y, estoy segura, una intercesora en cielo.
Gracias Vicki por ser fiel a la llamada de Dios con la fundación de Proyecto Raquel y gracias a todas las personas a las que nos has cambiado la vida para siempre y nos ha acercado al rostro de Divina misericordia, entre ellas yo la primera.