La cultura del odio y la exaltación de la muerte
por Wiederholen
A las 19:30 hora de Israel, una hora más en España, un atentado cometido por terroristas árabe-palestinos ha acabado con la vida de cuatro israelíes en una carretera de Judea-Samaria a la altura de Kirita-Arba, cerca de la ciudad de Hebrón. Todos eran miembros de la misma familia, sus edades comprendían entre los 25 y los 40 años, y una de las víctimas estaba embarazada.
Fueron tiroteadas a eso de las 19.30 hora local 18.30 hora de España.
El paramédico, Guy Gonen, dijo que "las cuatro víctimas fueron disparadas con numerosas balas, desde una distancia cercana". Las fuerzas de
Las Brigadas de los Mártires de Al Aksa, nazional-panarabista del presidente Mahmud Abás, se ha atribuido el atentado. "Este ataque es una respuesta a las continuas agresiones de Israel a nuestros lugares sagrados, a sus continuas incursiones en nuestras ciudades y a la coordinación de seguridad entre Israel y
Ningún pueblo puede permitir que sus miembros y conciudadanos sean asesinados vil e impunemente por criminales.
Kuwait expulsó a los árabe-palestinos después de que estos colaboraran con Saddam Hussein para ocupar el emirato. Más de 400.000 árabe-palestinos fueron expulsados y nadie se quejó contra Kuwait.
Los árabe-palestinos musulmanes han votado a grupos que quieren la destrucción de Israel. Por mucho que Israel ceda a
Muchos árabe-palestinos son sirios, otros jordanos y el resto egipcios. Son el caballo de Troya del islamismo y del nazional-socialismo panarabista contra Israel.
El crimen cometido por estos árabe-palestinos no es rechazado por sus correligionarios, goza del apoyo silencioso y tácito de gran parte de la sociedad árabe-palestina que es incapaz de amar más a sus hijos que lo que odia a sus enemigos.
La sociedad árabe-palestina ha incorporado tanto el odio al judío, el rechazo a la alteridad, la cultura del aborrecimiento y la animadversión y la exaltación de la muerte en la médula de su ser que no es más que su esencia.
Lo que caracteriza a la colectividad árabe-palestina es su odio extremo al judío. Sin odio al judío es incapaz de cohesionarse, sin el rechazo a la alteridad judía, -que también se extiende en el rechazo a la minoría cristiana- le es imposible sentirse como colectividad.
Si los árabes-palestinos son incapaces de vivir en paz, si son ineptos para abandonar la cultura de la muerte y del odio, si no tienen interés en dejar de exaltar la muerte, si son incapaces de amar más a sus hijos que lo que odian a sus enemigos, la paz será imposible, y no quedará más remedio que transferir todos los árabe-palestinos a Jordania, Siria y Egipto.
Los países árabes transfirieron a los judíos que vivían desde mucho antes de la expansión del Islam. Israel los acogió.
A este paso será conveniente pensar si es adecuado en acabar la transferencia, pero en sentido inverso a la que realizaron los árabes, transferir los árabe-palestinos, que se han apropiado incorrectamente el nombre de palestinos, a sus países de origen: Jordania, Siria y Egipto.
Después de
Es una lastima tener que llegar a esto, pero si la convivencia es imposible, mejor es el divorcio, y que los ocupantes extranjeros árabes se vuelvan a sus tierras. Si no quieren la paz, que se vayan. La superficie del mundo árabe es 500 veces más grande que Israel.
Los antisemitas y judeófobos obviamente discreparán, el odio no les permite ser coherentes, la judeofóbia que han mamado les altera el raciocinio.Los judeófobos del siglo pasado decían a los judíos de Europa: “Iros a vuestra tierra, iros a Palestina”. Ahora sus hijos putativos judeofóbicos dicen: “Judíos salid de Palestina”.
Estos antisemitas judeofóbicos son incapaces de protestar por las masivas matanzas que cometen los árabes del Sudán, por las que comete Turquía contra los kurdos y asirios, ni por las que los mismos árabes cometen contra sus hermanos como en el Yemen y otros tantos países, ni por las expulsiones masivas de poblaciones que los árabes y/o musulmanes realizan en tantos países.
Estos judeófobos son mayormente extrema izquierdistas y son incapaces de protestar por las masivas transferencias que la antigua URSS realizó, o la actual Rusia hace.
Israel tiene que pensar en su seguridad, y si no es posible la convivencia, mejor es el divorcio que la guerra, mejor es que los árabes vuelvan a sus países que el desastre de un conflicto.
Si los árabes-palestinos no quieren la paz, Israel tendrá que pensar en defenderse, y en transferir a aquellos que no quieran la paz.
Si los árabes-palestinos quieren la guerra, que la tengan entre ellos, y dejen al resto tranquilos.
NOTAS
http://www.aurora-israel.co.il/articulos/israel/Titular/31423/
http://www.jpost.com/Israel/Article.aspx?id=186614