De los tres monotemas con los que nos obsequian hoy día los teleadoctrinarios españoles
por En cuerpo y alma
Esto tiene un tufo a adoctrinamiento express con tintes de urgencia que ya no hay Blas que lo soporte. Todos los días, todos sin excepción, todos, cualquier telediario del país (o por mejor decir, cualquier teleadoctrinario) obedece al mismo e invariable guión.
Primero, una noticia sobre machismo, cualquiera vale. Triste, sumamente triste, que haya una mujer muerta a manos de su pareja. Pero no siempre la hay, lo cual no nos libra de seguir dándole “machete al machote”. A menudo en detrimento de noticias fundamentales de las que este país ni se entera (pinche aquí para conocer una de ellas, sólo a modo de ejemplo, pinche aquí para conocer otra) o, simplemente, de uno de esos hombres invisibles –muchos más de los que uno pueda creer-, o hasta unos niños, muertos a manos de una mujer.
La segunda noticia va, invariablemente, sobre cambio climático. A veces tiene que ver con la inmensa estructura creada para implantar la ideología del climate-change, pero por lo general, se refiere simplemente al fenómeno meteorológico que marca el día en cuestión, tratado, invariablemente, en términos de alarmismo finisecular y de cabreo: que haga calor o que haga frío, que llueva o que no llueva... no falta jamás un tío cabreado entrevistado por la calle para quejarse del tiempo que hace con expresiones del rango "nos lo estamos cargando", "no se había visto nunca nada igual", "esto es insoportable", "ya no sabemos si es invierno o es verano", etc. etc. etc.. El otro día -me hizo gracia- una muchacha “de color” (negra no, por favor, “de color”), pero bien de color, y de unos veinte años, con acento de haber aprendido español anteayer y de haber llegado el día antes, diciendo “aquí en Bilbao, esto no lo hemos conocido nunca”.
Y para terminar, la tercera, ésta sobre tráfico, en un intento de hacernos digerible la sangría a la que nos somete nuestro endeudadísimo estado con las multas de tráfico más caras de Europa y del mundo. (¿Les he contado alguna vez que aparcar mal en Friburgo (Alemania) con un salario medio un 33% superior al español y alcalde ecologista, lleva aparejada una multa de ¡¡¡10 euros!!!?). En los telediarios españoles es noticia con inusitada frecuencia, a veces hasta de portada y con foto del coche en cuestión y matrícula pixelada... ¡¡¡que un señor vaya a 135 por hora!!!, cosa que, por cierto, no es ni sancionable en Francia, Italia o Alemania, sólo a modo de ejemplo. Un día, Telemadrid abría su telediario con la noticia de un coche que entraba mal en una rotonda...
Que sea La 1, que sea Telemadrid, que sea Cuatro, que sea la Sexta, que sea Disneylandia, desde hace mucho tiempo no hay telediario en España con lo que hay que tener para salirse un ápice de la susodicha consigna de trebledoctrination.
El proceso se halla en un grado tal de perfeccionamiento, que ahora una misma noticia cubre ya dos campos de los tres mencionados. El último logro de los trebledoctrinators consiste en un informe "nuevo" (nuevo, ¿eh? Este es nuevo, no iban a presentar los miles que se han hecho ya sobre el tema, más viejos que la tos) que demuestra que las mujeres producen al volante menos accidentes que los hombres, tema tratado, naturalmente, con la neoterminología al uso, machos criminales hipertestosterados frente a damiselas ireneo-salvíficas. Lo que al ritmo que van las cosas, no se me antoja sino el preludio de un nuevo carnet de conducir con distintas condiciones para unos y para otras. O lo que es aún más probable: un sistema de carnet por cuotas que separe un porcentaje de permisos para mujeres y otro menor para hombres…
¡Ahhh! Pero aún falta una cosa que todavía no se le ha ocurrido a nadie. ¿Por qué no relacionar los tres? ¿Por qué no incorporar al susodicho informe una nueva variable que vincule también el cambio climático a los "valiosísimos" resultados ya obtenidos que relacionan machismo y multas? No sé, un reportaje que demuestre, por ejemplo, que la manera de conducir de las mujeres, que de hecho producen menos accidentes, es también más climate-friendly, y que es la agresividad machista al volante la responsable de que unos días llueva y otros haga sol.
¿Que eso no es verdad y que por lo tanto no se puede hacer? ¿Y desde cuándo nos ha preocupado semejante nimiedad a los grandes periodistas del neorrelativismo? Se busca a la empresa demoscópica adecuada, se le explican bien los resultados que queremos obtener, le ponemos al tema un nombre chulo (¿que les parece a Vds. “machismo climático” o “violencia másculo-meteorológica”?), implicamos en el tema al Programa de Naciones Unidas sobre Población y a alguna ONG creada por Al Gore o algún otro icono de la neoprogresía mundial, organizamos (con dinero público, naturalmente) una conferencia en Yakarta, El Cairo o Addis Abeba, lo que siempre da un aire entre folk y naif de intelectualidad y progresía... ¡y a otra cosa, mariposa!
Bueno, es una idea. Se la regalo al “Lobby”, (así, con mayúsculas). A mí me parece buena. Que juzguen “ellos”. Y Vds. ya saben, a hacer mucho bien y a no recibir menos. Falta nos hace.
©L.A.
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