El reto del amor de hoy es que le des importancia a las palabras

22 diciembre 2014 00:00

Año del Señor 2014
Lerma, 22 de Diciembre

Hola, buenos días, hoy Aroa nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

HABLANDO SE ENTIENDE LA GENTE

Buenos días, amigos, el reto del amor de hoy es abrir la puerta de tu interior con tus palabras para que los demás te entiendan.

No os podéis ni imaginar qué bello está el monasterio, todo lleno de belenes. Cada monja ha puesto el suyo y a su estilo, cada nacimiento muestra el ser de cada una. Os voy a contar dos cosas que me han ocurrido y cómo el Señor me ha hablado a través de ellas.

Me quedé mirando el belén que habían puesto Sor Inés y sor Ana en la iglesia. Es precioso, pero, a primera vista, yo no entendía nada. Sabía que lo que miraba encerraba un gran misterio lleno de belleza interior manifestado en lo exterior, por eso le dije a Inés:

-¿Me lo explicas?

Y ella me contestó:

-Mira, esto es Adán; esto es Abrahán; esto, Moisés; estos son los pastores; esto, los reyes; esto es el apocalipsis, y todo muestra la historia de salvación que confluye en la Encarnación del Hijo de Dios y nosotras (la comunidad) somos las ovejas de detrás que van hacia el misterio...

Bueno, esto es una resumidísima explicación de todo lo que me dijo pero, después de sus palabras, todo me pareció más bello, más lleno de sentido, más real y lo entendía todo.

Salí tan contenta de la iglesia que vi a la madre priora en su nacimiento y me paré a mirarlo pero pensé que seguro que también cada figura y posición tenían su sentido, y le pregunté:

-¿Me lo puedes explicar?

Me dijo:

-Mira, lo más importante es el nacimiento, por eso está en el centro y más elevado, y detrás está el pino en forma de árbol que representa el árbol de la vida. Ahí empezó todo y allí fue nuestra salvación. Luego está toda la gente, los reyes, Herodes, los pastores, pero lo importante es la gruta y está en medio, acogiendo a todos...

Bueno también las explicaciones fueron más explícitas pero, después de sus palabras, yo lo miraba todo con más cariño y más alegría. Entonces entendí lo que el Señor me mostraba con estos dos acontecimientos, lo importante que es hablar y compartir desde nuestro interior, cuántos mal entendidos por dar interpretaciones erróneas a una cara o a una ironía. Dios lo tuvo claro, para que le entendiéramos se encarnó para hablarnos en el mismo lenguaje.

El reto del amor de hoy es que le des importancia a las palabras, que no interpretes sino que mejor preguntes para que el otro te pueda explicar, y que abras tu interior con tus palabras para que los demás puedan gozar de tu riqueza interior.

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