Bautizo múltiple
Entre el trío Lalalá y los niños del coro existe la misma distancia que entre Massiel y Schubert pero cuando la primera canta a la mañana lo hace con un entusiasmo que, en cierto modo, le aproxima a la alegría de quienes, desde que encuentran a Jesús, entonan un cántico nuevo. Como el que hoy han interpretado los lactantes bautizados por el Papa en la Capilla Sixtina, donde decenas de bebés han cantado a capela una pieza para sonajero, su primera maraca.
Francisco se ha mostrado entusiasmado por oficiar en el bautizo múltiple el día en que se celebra el de Juan a Jesús en el Jordán. Huelga decir que el Papa se encuentra entre pañales como en casa porque un hombre con carácter de abuelo bueno, que le hace entrañable y comprensivo, está en su salsa allá donde reine el hermoso desorden de la libertad, entendida ésta como la improvisación del crío que gimotea si no recibe a su hora la segunda toma.
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