SU OBRA TRATA DE OFRECER TRANSCENDENCIA
El artista católico José Cosme expone en Shanghai una escultura de estilo teológico-conceptual
Cosme es uno de los pocos artistas católicos de arte contemporaneo que tiene una fuerte vertiente internacional.
El artista valenciano José Cosme expone desde ayer martes una escultura de estilo teológico-conceptual en la feria de arte contemporáneo de Shanghai, en la que participarán, hasta el 12 de septiembre próximo, más de mil galerías de arte e instituciones de cincuenta países, coincidiendo con la Exposición Universal que se celebra en la ciudad china.
Una vez concluida la “Shanghai Art Fair 2010”, la escultura será ubicada “de forma permanente en una plaza” de la ciudad china, según ha informado a la agencia AVAN José Cosme, que fue uno de los tres españoles que participó en la Capilla Sixtina del Vaticano en el encuentro del papa Benedicto XVI con artistas del todo el mundo el pasado 21 de noviembre.
La escultura, titulada “Identidad”, pretende resaltar “la importancia del individuo, su búsqueda de la trascendencia”, así como “el diálogo entre las culturas, desde el nexo común de la religiosidad, y el respeto a la individualidad de cada uno”.
El conjunto muestra una huella dactilar del propio autor, de tres metros de altura que, en su reverso, se sumerge en un fondo negro que evoca “el misterio” y, en su anverso, emergiendo, la pregunta en chino “¿Dónde está el elemento 3?”. Se trata de una fórmula que emplea Cosme en su obra desde hace años para hacer referencia a la trascendencia.
A partir de esa pregunta, el autor persigue establecer un diálogo con todas las culturas y religiones, que “coinciden en cuestionarse dónde está aquello que va más allá”.
Una vez concluida la “Shanghai Art Fair 2010”, la escultura será ubicada “de forma permanente en una plaza” de la ciudad china, según ha informado a la agencia AVAN José Cosme, que fue uno de los tres españoles que participó en la Capilla Sixtina del Vaticano en el encuentro del papa Benedicto XVI con artistas del todo el mundo el pasado 21 de noviembre.
La escultura, titulada “Identidad”, pretende resaltar “la importancia del individuo, su búsqueda de la trascendencia”, así como “el diálogo entre las culturas, desde el nexo común de la religiosidad, y el respeto a la individualidad de cada uno”.
El conjunto muestra una huella dactilar del propio autor, de tres metros de altura que, en su reverso, se sumerge en un fondo negro que evoca “el misterio” y, en su anverso, emergiendo, la pregunta en chino “¿Dónde está el elemento 3?”. Se trata de una fórmula que emplea Cosme en su obra desde hace años para hacer referencia a la trascendencia.
A partir de esa pregunta, el autor persigue establecer un diálogo con todas las culturas y religiones, que “coinciden en cuestionarse dónde está aquello que va más allá”.
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