El Atleti (1934-1939), futbolistas víctimas de la izquierda (9)

De modo que José Ignacio Corcuera afirma en su artículo Futbolistas nacionales fallecidos en la Guerra Civil, el cual hemos tomado como base para elaborar las últimas entradas, que:

«el Atlético de Madrid destripa sin proponérselo dos de los cuentecillos urdidos tanto a lo largo de aquellos casi tres años de locura, como durante la posguerra: el de que pocos futbolistas se batieron el cobre allá donde reinaba la muerte, y la pintoresca leyenda de que los “colchoneros” son y han sido tradicionalmente de izquierdas, como contrapunto a la masa de seguidores “blanca”, más conservadora. Sabido es que los rojiblancos tuvieron por presidente a un aristócrata (Luis Benítez, Marqués de La Florida, entre 1952 y 1955). Pero, además, acumularon un elevado número de caídos en defensa del ideario “nacional”, entre quienes alguna vez lucieron su camiseta».

Sea como fuere, este es el listado principal que hemos ido desgranando:

1. MANUEL GARNICA SERRANO (1891-1939), 48 años. Jugó de delantero de 1907 a 1917.
2. MANUEL GARCÍA DE LA MATA PÉREZ (1903-1937), 34 años. Fue portero del Atleti dos temporadas: la de 1921-22 y la de 1922-23.
3. RAMÓN TRIANA DEL ARROYO, conocido como MONCHÍN TRIANA (1902-1936), 34 años. Centrocampista, y jugador histórico del Club Atlético de Madrid.
4. MIGUEL DURÁN TERRY, conocido como POLOLO (1901-1934), 33 años. se incorporó en 1919 al Atlético, del que fue defensa y capitán.
5. ALFONSO OLASO ANABITARTE (1905-1937), 32 años. Defensa.
6. VICENTE PALACIOS GONZÁLEZ (1900-1936), 36 años. Fue el autor del primer gol en la Liga del Club Atlético de Madrid. Delantero fuerte y rápido, con buen regate y tiro, jugó como titular en la década de los veinte.
7. ÁNGEL AROCHA GUILLÉN (1907-1938). 31 años. Delantero, jugaba en el Atleti cuando estalló la guerra civil.
8. ANTONIO MAZARRASA FERNÁNDEZ DE HENESTROSA (1909-1936), 27 años. Fue extremo del Atlético de Madrid.

A ellos añadimos:

El delantero vasco DÁMASO URRUTIA GALLEGOS (1903-1936), que destacó en equipos como Oviedo, Levante y Valencia, jugó una temporada -la 1927-28- en el Atlético de Madrid. En 1936, ya retirado, con 32 años, ejercía en Gijón como conserje. Y allí lo asesinaron unos furibundos republicanos, durante los primeros y turbulentos días que señalaron el comienzo de nuestra Guerra Civil.

La temporada 1933-34 fue Atlético el mediocentro RAMÓN MENDIZÁBAL AMEZAGA que nació en Santurce (Vizcaya) en 1914. Fue jugador de futbol del Real Madrid en la temporada 1932-1933 a la edad de 18 años (campeón de liga, pero no jugó). Al año siguiente en el Atlético Madrid y al siguiente en el Hércules.

Corcuera afirma que «la última temporada prebélica, donde, por cierto, dejó bien sentado con 22 años que su sitio estaba entre los buenos de 1ª División».

En el blog Santurtzi Historian zehar sobre genealogía, heráldica e historia de Santurce leemos que:

«Al estallar la sublevación militar, Ramón se enroló en la aviación franquista. Hasta 1938 ejerció como alférez piloto en uno de los muchos Fiat 32 de procedencia italiana, actuando sobre todo en Andalucía y Extremadura. El 11 de febrero de 1938, Ramón estaba al frente de un biplano modelo AERO-A-101 de fabricación checoslovaca perteneciente a la 2ª Escuadrilla del 5 G-17 con base en León. Ocupaba el puesto de piloto principal mientras que Luis Torralda Escudero era su copiloto. Los dos aviadores se disponían a tomar tierra en el aeródromo de Las Bardocas en Badajoz. En la maniobra de viraje para enfilar el aeródromo, del fuselaje del avión checoslovaco empezaron a desprenderse trozos de la nave, lo que impidió a los pilotos controlar el aparato y el avión se estrelló en pleno centro de Badajoz, en la calle Bravo Murillo, impactando de lleno contra algunas viviendas causando varios muertos, entre ellos una niña de 7 años, además de los pilotos».

El blog Guerra en Madrid completa esta información:

«En un informe del jefe regional de la zona aérea del sur, explicaba que la causa del accidente: El avión que motivó el accidente inició un amplio viraje sin presentar aspecto anormal, comenzando de pronto a desprenderse trozos de tela y costillas que fueron después recogidos en las afueras de la población, debido probablemente a desprenderse la nodriza por trepidación y caer sobre uno de los planos. El aparato continuó ciñendo el viraje aumentando su velocidad encabritó inclinado del lado derecho, cayendo casi verticalmente en el centro de Badajoz».

Finalmente, recogemos el nombre de MANUEL SUÁREZ DE BEGOÑA, conocido como MANOLO SUÁREZ, comenzó a practicar el fútbol a la temprana edad de 13 años, en el Athletic Club aficionado. Fue delantero del Athletic de Bilbao, del Arenas Club de Guecho y del Hércules. Y jugo una temporada en el Atlético de Madrid: la de 1927-1928.

Fue el entrenador que consiguió el primer ascenso del Hércules CF a Primera. En la temporada 1935-36 dejó al Hércules en sexta posición, con 24 puntos.

Manuel Suárez apareció muerto en una cuneta de Aguas de Busot, “paseado” durante la noche o madrugada del 23 de agosto de 1936. Aún no había cumplido 40 años.

Una foto de la que habla José Luis Corcuera

Corcuera termina su extenso y trabajado artículo Futbolistas nacionales fallecidos en la Guerra Civil afirmando:

«La sangría en el Atlético de Madrid fue grande. El club posee una foto histórica que, por su crudeza, debería ver la luz en libros de texto, como testimonio de un pasado vergonzante y aviso de lo que jamás debe repetirse. Con su uniforme a rayas y todos en pie, un día posaron

Pololo, caído durante la Revolución de Asturias

Luis Olaso, evadido de zona republicana para alistarse como médico en las brigadas de requetés navarras.

Fajardo, oficial de Ingenieros mientras duró la contienda

Barroso, capitán en la aviación franquista

Burdiel, oficial de Ingenieros

Monchín Triana, asesinado

De Miguel, asesinado en Paracuellos, según algunas fuentes, si bien otras lo hacen fallecer apenas hubo concluido el conflicto, incapaz de sobreponerse al hambre y padecimientos de distinta índole

Alfonso Olaso, fusilado en Teruel

Vicente Palacios, asesinado alevosamente por una “brigada del amanecer” en el Madrid republicano.

De los once, sólo Quico Martín y Ortiz de la Torre, no consta tuvieran que mirar a la muerte cara a cara, o recibir su abrazo de muy mala manera, antes de tiempo.

atletico_pdf.pdf (cardenaldonmarcelo.es)