Después de matar a los curas se mataron entre ellos (1)

Uno de los sacerdotes que fallecieron el año pasado, a los 97 años, fue monseñor Jaime Colomina Torner, entre muchas cosas era canónigo emérito de la catedral primada de Toledo. Ferviente devoto y biógrafo de la sierva de Dios María de la Piedad Suárez de Figueroa y Moya. En su libro afirma que «en todo Toledo (y Cuenca) no hay caso más claro y fácil que éste; todo lo hicieron ellos, el crimen, el castigo y la certificación del martirio. La autoridad republicana la asesinó y la autoridad republicana fusiló a los asesinos en octubre de 1937».

Y se explica: «Ciertos acontecimientos luctuosos y oscuros ocurridos en Villanueva, a principios de 1937, motivaron que se desempolvaran y denunciaran formalmente los crímenes de algunos implicados en dichos acontecimientos. Algunos periódicos relacionados con CNT, como “Castilla Libre”, “¡Alerta!” y “Frente Libertario”, iniciaron una furibunda campaña contra esos responsables de Villanueva y Villamayor de Santiago. Los ataques contra otros compañeros del mismo Frente Popular son tan duros que me resisto a reproducirlos, pues, como cristiano, pienso en el respeto a los muertos y en el posible perdón de Dios a los culpables. Ni siquiera citaré los nombres de los asesinos; muchos lectores los recordarán o podrán hallarlos en cualquier hemeroteca que contenga los periódicos citados, en varios números de marzo, abril y junio de 1937».

He recordado la historia “denunciada por los mismos izquierdistas” al rescatar esta página de la hemeroteca que me hizo llegar José Manuel de Ezpeleta. Se trata, ni más ni menos, que del órgano de la federación provincial de la CNT de Toledo. Y con su titular, yo pongo el mío.

LOS “CONTROLADOS” SIGUEN EL CAMINO DEL CRIMEN

El Secretario de nuestro Sindicato de Mascaraque, gran batallador antifascista, que pasó las mejores horas de su vida luchando en las filas del Partido Comunista, fue arrancado de su casa por los milicianos de una brigada que ha dejado recuerdo trágico en la provincia, y con la complicidad del Alcalde fue conducido a Mora de Toledo y asesinado vilmente.

A los asesinatos cometidos en los pueblos de La Guardia, Miguel Esteban, Corral de Almaguer, Ajofrín, Vilafranca, Villanueva de Alcardete, Sonseca, etc., hoy tenemos que añadir el de Mascaraque.

Días pasados han sido fusilados, sin causa justificada, más de sesenta hombres y mujeres en Mora de Toledo.

¿Quiénes son los asesinos? Los que se llaman “controlados” en la prensa y en la tribuna y luego en su vida societaria hacen lo contrario.

Ningún delito habían cometido las personas ajenas a nuestra organización que fueron objeto de las hordas salvajes, pero aunque lo hubiesen cometido, ¿para qué se crearon los Tribunales Populares?

¡Justicia! ¡Justicia implacable pide el pueblo!

¡Justicia contra los asesinos!