Sor Andrea, Sor Auxilio y Sor Patrocinio
10.11. Sagrada Familia.04 - Hnas. Capuchinas de la Madre del Divino Pastor
Sor Andrea (Ramona) Solans Ballesté
Nacida en 1875 en Lérida, a los 17 años solicita el ingreso en la Congregación de las Hermanas Capuchinas de la Madre del Divino Pastor. Inicia el postulantado en Sants, y en 1899 emite la profesión perpetua, que vive en humildad y total fidelidad al carisma de su fundador, el Beato Padre José Tous.
Entregada, alegre y creativa, transmitía a sus alumnas un profundo amor a María, Madre del Buen Pastor, y siguiendo la exhortación de su fundador, en su colegio de Premiá de Mar se arrodillaba con las niñas antes de empezar cada día las clases, e invocaban juntas la protección de la Virgen.
Al desatarse la persecución religiosa de 1936 tuvo que abandonar el colegio y refugiarse con la Hermana Auxilio Noguera en casa de la familia Estival, pero viendo desde la terraza las humaredas de las iglesias y conventos ardiendo en Barcelona, y como eran obligados los vecinos del pueblo a entregar todos los objetos religiosos para quemarlos en la plaza mayor, el 31 de julio deciden ambas salir de Premiá en dirección a Barcelona para ocultarse, pero en el trayecto pensaron era mejor marchar a Manresa donde residía la familia de la hermana Auxilio.
Tras ser registradas en la estación de Francia, tomaron el metro para coger el tren hacia Manresa y bajaron en la estación de la Torrasa en Hospitalet. Un grupo de milicianos que les habían seguido les detuvo al salir. Ingenuamente las dos religiosas les preguntaron si iban bien para coger el tren para Manresa.
Les dijeron que sí, y a su vez éstos les preguntaron si eran monjas, a lo que respondieron afirmativamente. Reemprenden el camino por la carretera del Prat a Hospitalet, y al volverse por ver si las seguían, les ven apuntándoles con sus fusiles. Gritaron: ¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!, y los milicianos dispararon sobre ellas. La hermana Andrea cayó muerta en el acto, mientras la hermana María Auxilio pudo arrastrarse hasta el borde del camino y recostarse en un árbol, donde un miliciano la remató a quemarropa.
La hermana María del Calvario Artigas, dejó esta declaración sobre la muerte de las hermanas Solans y Noguera: «Un día vinieron a casa dos de la FAI porque querían comer, y les dimos de todo lo que teníamos». Después de comer y beber, uno de los milicianos le confesó que hacía dos días su compañero había asesinado a dos monjas (que coincidían con las dos hermanas huidas de Premiá). Iban a pie por la carretera que lleva de Hospitalet de Llobregat a Manresa, y decían en voz alta: «Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío». «Mientras gritaban estas palabras fueron muertas a tiros en un descampado junto a la carretera». Su cadáver fue identificado por el número que tenía de ingreso en la Congregación, marcados en sus pañuelos.
Practicada la autopsia del cadáver de Sor Andrea Solans Manubens dicen los forenses del Hospital Clínico que: “presenta dos heridas, por arma de fuego, una en la región fronto-parietal izquierda, con destrozo del cerebro, y otra, también en el mismo lugar con levantamiento de la base del cráneo”.
Sor Mª Auxilio (Josefa) Noguera Manubens
Nació en Manresa en 1880, ingresando en el noviciado de las Capuchinas de la Madre del Divino Pastor a sus 16 años, e hizo su profesión perpetua en 1903.
Al estallar la revolución estaba destinada en la Comunidad de Premiá de Mar como procuradora. Expulsada del convento el 20 de julio se alojó con la hermana Andrea en casa de los Sres. Estival, esperando la oportunidad de marchar a Manresa con su familia, destino al que no llegaría. Un hijo de los Sres. Estival que les acompañó en su viaje a Barcelona, fue testigo de su detención.
En el Sumario en que consta la muerte de ambas hermanas se dice que fueron asesinadas en el barrio de La Torrasa de Hospitalet el 31 de julio de 1936, y que murieron invocando “¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!”. Sus cadáveres fueron llevados al Depósito Judicial y enterrados en la fosa común. En 1939 pudo ser identificada, por hallarse en su bolsillo el pañuelo con el número 170, el de su registro en la Congregación.
Sor Patrocinio (María Magadalena) Vilanova
Nacida en Sant Feliu de Codines (Barcelona) en 1877, sintió su vocación religiosa a los 14 años, pero no pudo seguirla hasta los 31, por ser la única mujer de la familia y tener que atenderla, ingresando en 1909 en el Instituto de Capuchinas de la Madre del Divino Pastor y profesando en la Casa Noviciado de Sarriá.
Religiosa humilde, gozosa en la cocina, cariñosa y amable con todos. Se la veía siempre con el rosario en la mano, y como fiel hija de san Francisco, cuidaba de los animales de la granja. Irradiaba paz, alegría y serenidad en su entorno.
Al iniciarse la persecución el 20 de julio de 1936 toda la Comunidad del Colegio de Sarriá fue expulsada, y la hermana Patrocinio se refugió en la vecina casa de los Sres. Aumedes, en la calle Cercado de San Francisco, desde la que pudo contemplar el asalto e incendio del Colegio.
No pudiendo continuar en dicha casa, buscó refugio en la de su hermano en Sants, pero a los pocos días, temiendo comprometerles, dejó una nota de despedida y marchó a ofrecer sus servicios al Hospital Clínico, donde, preguntada si era religiosa, lo afirmó, por lo que no la admitieron.
Al salir a la calle la siguen, y sintiéndose acechada, se encamina a su pueblo natal de San Feliu de Codines a casa de uno de sus hermanos, al que nunca llegaría. La detuvieron, arrestaron y asesinaron por ser religiosa, derramando su sangre por Jesucristo.
La Hna. Dolores Massó recuerda: “La Hermana Patrocinio presintió iba a morir y me pidió que le cosiera un crucifijo en la ropa interior, pues preveía lo que le acontecería en el camino, …supe después que el día 31 de julio fue introducido su cadáver en el Hospital Clínico donde estuvo expuesto con el número 4102”.