La misa tradicional en encuestas

El movimiento Paix Liturgique (Paz Litúrgica) que viene creciendo exponencialmente en Francia desde la publicación del Motu Proprio Summorum Pontificum ha tenido la industriosa idea de encargar una encuesta profesional, -es decir, realizada por una empresa especializada, con métodos de evaluación probados y rigurosamente técnicos- sobre este tema: cuánta gente asistiría a la Misa Tradicional, hoy llamada también Gregoriana o Forma Extraordinaria del Rito Romano. Los resultados sorprendieron a propios y ajenos...

“En Italia el 63% de los católicos practicantes asistiría regularmente (al menos una vez al mes) a la forma extraordinaria de la misa, si tuviera la posibilidad material de hacerlo. Éste es el interesante resultado del sondeo efectuado por el instituto Doxa para la Asociación Paix Liturgique y el sitio internet “Messa in latino”.



”Esta encuesta sobre la recepción del Motu Proprio Summorum Pontificum en Italia ha sido realizada a fines de septiembre sobre una muestra de 1001 personas mayores de 15 años (que es la muestra standard que se toma para un sondeo representativo a nivel nacional). Precisamos que Doxa es uno de los más importantes institutos de encuestas del país, reconocido por el rigor científico de su trabajo.”



La misa tradicional, piedad, solemnidad, devoción...

La primera conclusión llamativa es que un alto porcentaje de los católicos, en especial los no practicantes, desconocen la existencia o el contenido del Motu Proprio que desembargó la misa según el rito plurisecular romano. Afirma Paix Liturgique:

“En el país del Papa sólo el 64% de los católicos practicantes conoce las disposiciones del Motu Proprio Summorum Pontificum promulgado hace dos años sobre el uso de la forma extraordinaria del rito romano. Esta cifra es la triste consecuencia del silencio que algunos obispos y miembros del clero oponen a la política de reconciliación en el seno de la Iglesia llevada adelante por el Santo Padre”.

Recordará el atento lector que este tema se debatió  a lo largo de cuatro décadas, a partir del lanzamiento de la reforma litúrgica auspiciada por el Concilio Vaticano II y llevada a cabo por un equipo de liturgistas designados por el Papa Paulo VI.

El hecho de que la Santa Sede hubiese previsto un indulto para seguir celebrando el rito anterior destinado a sacerdotes ancianos o impedidos dio la primera señal equívoca sobre que dicho rito quedaba derogado. La segunda, quizás haya sido el llamado “Indulto Agatha Christie”, así llamado porque el Papa Paulo VI, al ver la firma de la popular escritora inglesa en una lista de intelectuales y artistas que lo solicitaban, decidió en el acto autorizarla. De estos “indultos”, es decir, excepciones, se dedujo la prohibición

 Pero en realidad no hubo documento alguno que realizara esta derogación, y apena si un vago texto que daba a entender que la lilturgia reformada sería de ahí en más la única de la Iglesia romana. Es opinión común de los teólogos y liturgistas que tal abrogación excede la potestad pontificia por tratarse de un rito apostólico, es decir, revelado.

El Cardenal Cañizares celebrando el rito tradicional en Santa María la Mayor, en Roma.

Lo cierto es que en 2007 el Papa Benedicto zanjó definitivamente la cuestión y trató de encauzarla en la práctica, lo que no es tan sencillo como dirimir la cuestión teórica.  Así pues, envió junto con el Motu Proprio, una carta a todos los obispos del mundo explicando las razones de esta medida e invitando a la buena voluntad y cooperación.  Algo que se ha visto poco, sobre todo en Hispanoamérica.

La importancia de la encuesta de Paix Liturgique es que da vuelta el argumento más esgrimido en favor de las negativas reiteradas a los pedidos de misa tradicional, que el Motu Proprio claramente define como un derecho de los fieles y sobre todo de los sacerdotes, sin necesidad del permiso del ordinario. “en las misas celebradas sin el pueblo, todo sacerdote católico, tanto secular como religioso, puede utilizar el Misal Romano, sin que necesite permiso, ni de la Sede Apostólica ni de su Ordinario”. (Art. 2 del M.P.S.P.)

Asimismo, por el art. 3º  “las comunidades de los institutos de vida consagrada y de las Sociedades de vida apostólica”, pueden celebrar la Misa Tradicional. Y también: “En las parroquias, si hay un grupo estable de fieles, el Párroco acogerá de buen grado su petición”, según el art. 5º, inciso 1 del Motu Proprio.

La Encuesta de Paix Liturgique demuestra que un altísimo porcentaje de católicos tanto practicantes como no asistirían a la misa según la forma Extraordinaria una vez al mes e incluso un porcentaje significativo, una vez a la semana, es decir, que la adoptaría como su misa regular en la mayoría de los casos.

Dos hechos, destaca el comentario de quienes encargaron la encuesta, hechos que atentan contra una mayor demanda de la misa tridentina.

1) El desconocimiento del Motu Proprio, que los obispos y párrocos han tenido en general en el olvido, bloqueando activamente su difusión.

2) En Italia, la influencia de la Fraternidad (o Hermandad) San Pío X es escasa y solo tienen tres casas allí. De modo que esta aprobación es espontánea y no inducida por la militancia tradicionalista.

Finalmente, un tercero que todos podemos comprobar, la oposición al cumplimiento de las normas dictadas por el Soberano Pontífice por parte de obispos y párrocos, que es ilegal y abusiva. Es decir, va en contra de la legislación y de los deseos del Santo Padre. (Cfr. nuestro sainete Pontificorum... algo, en este mismo blog)

Los métodos para la negativa suelen ser: la argumentación de excusas fútiles, para negar o posponer, o la negativa sin más argumento. A lo cual podemos agregar una tercera estrategia, que hemos vivido en la Ciudad de Buenos Aires. Se trata de establecer una “misa latina tradicional oficial”, celebrada en lugares y horarios exóticos, y por sacerdotes decidamente enemigos de la liturgia tradicional, Con esto se logra desvirtuar la ceremonia (mezcla de lecturas y santorales, celebración versus populum, inclusive la predica contra la misa tradicional desde la propia celebración) y contribuir así a desanimar a los fieles.

Esta forma sesgada de hacer las cosas ofrece, en este caso al Cardenal Primado, Jorge Bergoglio, la oportunidad de quedar bien con Roma y con el ... (casi digo con el diablo).

Destaco, finalmente, este párrafo del informe de Paix Liturgique: “De todos modos no nos hagamos ilusiones y tengamos en cuenta que este sondeo italiano, no obstante haber sido realizado por un instituto profesional y reconocido, dejará impasibles a aquellos que se oponen al Papa y a su política de pacificación y de unidad. Es bien sabido que para todos los enemigos de la reconciliación en la Iglesia “los fieles ligados a la liturgia tradicional no existen” y “no hay ningún problema litúrgico”. Sin embargo los resultados de este sondeo (en Italia como en Francia) corresponden perfectamente a la tendencia revelada por uno de los indicadores más sensibles y más importantes para la vida y para la supervivencia misma de la Iglesia: el vivo interés por la forma extraordinaria del rito romano entre los jóvenes llamados a la vocación sacerdotal”.

Sres. Obispos y párrocos: ¿acaso no vale la pena probar, ya que tan buenos resultados ha dado, el rito tradicional...? Volveremos sobre el tema con datos interesantísimos sobre el atractivo del rito tradicional entre la juventud