Estoy con el P. Santiago Martín

Estoy con el P. Santiago Martín

 

Como un reguero de pólvora ha corrido por los medios esa dura carta del P. Sartorius en favor del P. Santiago Martín. Nutra página de ReL la recoge en otro espacio. El P. Santiago Martín el Fundador de los Franciscanos de María, periodista, comentarista religioso en ABC, un buen comunicador… Hace unos días, al terminar su Misa diaria, hizo una dura crítica de aquellos políticos, como la alcaldesa de Barcelona, que no quisieron poner los medios para proteger a los transeúntes de Las Ramblas de Barcelona, facilitando el paso a los terroristas que sembraron la muerte como sabemos.

 

                Venía a decir que los responsables de la tragedia no eran solo los terroristas, sino aquellos que no dificultan su acción siniestra por distintos motivos. Tal vez pensaban que Barcelona, por ser la ciudad que acoge con más entusiasmo a los islámicos se vería libre de sus amenazas como agradecimiento. Pero ya vemos que no es así. Quien quiere matar no tiene corazón para reconocer favores.

                Las palabras del P. Santiago levantaron ampollas. Muchos arremetieron contra él, y la misma autoridad eclesiástica le amonestó. Pero la inmensa mayoría silenciosa estaba a su lado. Alguien tiene que levantar la voz para defender a los inocentes.

 

                Y el P. Sartorius, toledano,  de la conocida familia Sartorius muy significada en la política de años pasados, desde Etiopía en donde se encuentra como misionero en la obra de la Madre Teresa de Calcuta, envió una muy dura carta dando las gracias al P. Santiago, apoyándolo en su valiente defensa de su persona y de su denuncia contra los políticos hipócritas que se pasan la vida reivindicando derechos ficticios autonómicos,  y mirando para otro lado cuando se trata de España y de su unidad en defensa de la vida.

                Esta carta sé que ha levantado ampollas en sectores muy cualificados, pero han caído como agua de mayo en ese inmenso campo de España habitado por gente de bien. Estoy con el P. Santiago, y agradecido con el P. Sartorius. Son los que están en la vanguardia de la defensa de los derechos humanos, sin ocupar poltronas ni puestos privilegiados. Y yo pregunto: ¿estamos seguros a la hora de defender la justicia y denunciar el mal, o tendremos que callarnos por temor a las represalias? A Jesucristo, y a miles de seguidores del suyos, la Verdad les costó la vida. Si a nosotros nos cuesta un disgusto merece la pena dar la cara.

                P. Santiago, estamos contigo. Me decía ayer un sacerdote congoleño que el único libro que ha salvado de un expolio que hizo ha sido “Orar con la Palabra” cuyo autor es el P. Santiago. Se propuso guardarlo como un tesoro. Hay que aprender del autor a valorar más la Palabra de Dios diaria, llevándola a nuestra oración personal. Lo recomiendo.

Juan García Inza
juan.garciainza@gmail.com
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