Benefício colateral
Benefício colateral
Se ha puesto muy de moda el término "daño colateral", con el cual nos referimos al mal que es causado sin ser buscado directamente y que es consecuencia de alguna acción que se realiza buscando un bien.
Sin duda también existen casos de "beneficios colaterales", que son aquellos bienes, que se derivan de una acción cuya intención tiene por objeto un mal determinado.
Recientemente hemos tenido dos sonados "beneficios colaterales", que deben ser aprovechados lo mejor posible, uno venido de Moncloa y el otro de Estrasburgo.
El Gobierno de España, como rezan, con obviedad tautológica según Zapatero, los logotipos que lo representan, tiene como principal objetivo la introducción de la "ideología de genero" y para ello es un magnífico instrumento el nuevo "Anteproyecto de Ley Audiovisual" recientemente aprobado en consejo de ministros, dicho proyecto limita de forma drástica, para lo que ahora tenemos, el acceso libre de niños y jóvenes a la pornografía, en caso de ser finalmente aprobado tal y como ha salido del consejo de ministros, solo se podrá emitir contenido pornográfico en las horas de madrugada y nunca "en abierto".
Lo de Estrasburgo tiene también un lado bueno, pues en su sentencia contra la presencia del crucifijo en el ámbito público, el Tribunal de Derechos Humanos dicta que tan solo a los padres compete la educación moral e ideológica de sus hijos.
Por todo ello pongámonos manos a la obra y exijamos el cumplimiento de estas decisiones hasta sus últimas consecuencias, sin duda su aplicación traerá consigo males no deseados, pero podemos sacar de todo ello dos inmensos bienes como son el acabar con el acceso gratuito, fácil y muchas veces no buscado, de nuestros hijos a la pornografía y con el adoctrinamiento ideológico que supone la asignatura de Educación para la Ciudadanía.
Germán Menéndez