Esperanza Aguirre admite que la abortada reforma del aborto es una de las causas del tortazo del PP

 
 
            …en las pasadas elecciones autonómicas y municipales.

            Aguirre ha resumido las razones del estrepitoso fracaso del Partido Popular en una, “el incumplimiento de algunos compromisos electorales básicos”, los cuales ha desglosado en cinco, ni uno más ni uno menos:
 
            - La despolitización de la justicia.
            - Las bajadas de impuestos.
            - La Ley del aborto.
            - La contundencia ante ETA.
            - La presencia en Cataluña.
 
            No es todo. Ha añadido la expresidenta de la comunidad que “hay muchas cosas que no han funcionado como debían en el partido”, y ha citado “los efectos negativos que ha tenido la corrupción entre nuestros votantes”.
 
            Ahora pinchen Vds. aquí y díganme, por favor, si la Sra. Aguirre leyó o no leyó “En Cuerpo y Alma” el pasado día 7 de este mismo mes.
 
            En esta ocasión (como en muchas otras, puede Vd. pinchar aquí para conocer alguna), Esperanza Aguirre ha hecho un gran discurso, quizás uno de los más importantes -o el más importante-, de su carrera política, aunque parezca también el de su retirada de la vida pública. El diagnóstico no ha podido ser más acertado. Y su colofón también: “no hemos sabido estar a la altura de lo que siempre hemos predicado y de lo que esos ciudadanos esperaban de nosotros”.
 
            Ha anunciado, por último, un congreso extraordinario. “Ahora se hace imprescindible que demos la palabra a nuestros simpatizantes y militantes” sobre la base de “un militante un voto”. Un congreso al que, para su completa transparencia, y como ella misma ha informado, no se presentará.
 
            El Sr. Rajoy haría bien en escuchar lo que le han dicho desde la sección madrileña de su partido. En su lugar, probablemente preferirá seguir repachingado en algún sofá de la Moncloa, escuchando al Oráculo de Cádiz y a su refinada esposa (pinche aquí, y también aquí, para conocer algunos de los momentos más elegantes de la primorosa carrera de tan delicada señora).
 
            Y bien amigos, que hagan Vds. mucho bien y no reciban menos. Sigue haciendo falta.
 
 
            ^©L.A.
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