La revolución cultural

 La revolución cultural

Nuestra sociedad actual, muy tecnificada, con adelantos fabulosos en muchos ordenes, impensables hacen unos años, está aquejada de una deficiencia esencial, que es la cultura. Estamos enrolados en una carrera vertiginosa por saber más de todo, en un ir más allá, pero sin pensar a donde nos lleva esta carrera. “Corres bien, pero fuera del camino”. . Se lo oí decir a Manuel Fraga cuando se dirigía a un adversario político. Me pareció una frase muy ingeniosa. Rebuscando comprobé que el autor de la misma es San Agustín. Bene curris, sed extra viam. Es muy importante reflexionar para saber dónde quiere ir uno y cómo hacerlo. ¿Pero cómo hacerlo en un mundo tan cambiante? (Igsegma). San Agustín siempre da en el clavo cuando pronuncia una sentencia. Correr fuera de camino, es exactamente lo que nos ocurre cuando no pensamos. Y este es un mal de nuestro tiempo.

            Dice Andre Piettre: Enseñar a pensar. A sentir. A expresarse para dominar el tiempo propio, humanizarlo: ¿acaso hay una tarea mayor? (“Carta a los revolucionarios bien pensantes”, pág. 65). Si observamos a nuestros convecinos, o cualquiera que pase por la calle, todos corren, todos buscan, generalmente estresados, no se sabe qué. Pregunta a cualquier joven de los que hacen ruido: -¿A dónde vas? ¿Qué busca? ¿Cuál es tu meta? La mayoría no saben qué decir. Recuerdo una pregunta que le hacían a un niño de diez años: - Tú que quieres ser el día de mañana? - Y el niño, sin pensarlo dos veces dijo: - Quiero ser rico. Ese niño, si mantiene su objetivo, correrá mucho, pero fuera de camino. Y encontramos a la mayoría de la ciudadanía embelesados ante la pantalla del televisor, o discutiendo de futbol, o de otras cuestiones intrascendentes, porque las importantes las ignoran.

            Hoy en la enseñanza, en la educación, se aportan muchos datos al alumno, pero no se le enseña a pensar. Andre P. le dirige a los profesores y educadores esta reflexión: ¡Si supierais, oh maestros demasiado sabios, ampliar vuestro saber; si tomaseis como reglas primordiales la claridad y la síntesis, si desterraseis todo fárrago, toda verborrea, el “bluff” pseudo-científico, ¡enseñaríais el doble de materia en la mistad de tiempo! Es una cuestión de disciplina y de disciplina de forma… Se trata de devolver la alegría de crear a unos hombres despersonalizados, mecanizados, automatizados, participando en cualquier gran obra nueva e innovadora que les ayude a descubrirse a sí mismos al descubrir su propio tiempo (o.c. pág. 66). ¿Te has preguntado alguna vez quién eres? Si te lo has preguntado, seguro te quedaste pensando por un momento qué responder, porque es difícil definir tu propia identidad. A veces, uno ni siquiera sabe por dónde empezar. Pero si algo he aprendido en la vida es que las preguntas más complejas en la vida tienen las respuestas más simples: Yo soy yo (Nelson Chicas).

            ¿Y qué quiere decir “yo soy yo”? Solo Dios pudo decir Yo soy el que soy. Los demás somos porque Alguien nos ha dado un soplo de vida. Partimos de un origen y vamos hacia un destino. Una persona culta piensa de donde viene y a donde va, y obra en consecuencia. Una persona culta piensa, reflexiona, busca respuestas y caminos a su vida. Los peregrinos compostelanos hacen un camino y saben bien cual es su meta. Y cuando llegan todos dicen: Ha merecido la pena.

            Muchos jóvenes deambulan por la vida aburridos, no encuentran alicientes al esfuerzo. Y se refugian en el alcohol, la droga, la pornografía… y algunos se plantean si realmente merece la pena vivir. Ha subido de manera alarmante el índice de suicidios. Es el resultado de una falta de respuesta a las preguntas esenciales. Nos falta pensar, dialogar, formación, y mucha fe. Garcia Morente, fue un catedrático de filósofia español, que sufrió una conversión y terminó ordenado de presbítero. Sobre la Verdad él nos dice: “La verdad de una afirmación consiste en la concordancia de lo que se dice con lo que es, no en el modo o método por el cual llegamos a tal afirmación”… “…, nadie puede dudar que la verdad es primariamente la concordancia perfecta entre lo que yo pienso que una cosa es y lo que esa cosa es efectivamente. En suma la verdad es la adecuación entre el pensamiento y la realidad”. “Cuando encontréis alguna vez doctrinas o sistemas filosóficos que contradigan un dogma de nuestra santa fe, estad seguros de que algún vicio oculto mina sus entrañas intelectuales” (citado por Juan del Carmelo).

            La cultura nos hace descubrir a genios que dedicaron tiempo a pensar, que ofrecieron, y siguen ofreciendo, soluciones a nuestras dudas, y que, muchos de ellos, encontraron a Dios en su búsqueda de la Verdad. Johannes Kepler 1571-1630, uno de los mayores astrónomos: “Dios es grande, grande es su poder, infinita su sabiduría. Alábenle, cielos y tierra, sol luna y estrellas con su propio lenguaje. ¡Mi Señor y mi Creador! La magnificencia de tus obras quisiera yo anunciarla a los hombres en la medida en que mi limitada inteligencia puede comprenderla “. Darwin (1809- 1882), Teoría de la evolución: “Jamás he negado la existencia de Dios. Pienso que la teoría de la evolución es totalmente compatible con la fe en Dios. El argumento máximo de la existencia de Dios me parece la imposibilidad de demostrar y comprender que el universo inmenso, sublime sobre toda medida, y el hombre hayan sido frutos del azar”. Y así muchos genios cultos que encontraron a Dios por la fe.

            En definitiva, es urgente que nos planteemos la necesidad de promover una revolución cultural, que haga posible volver a una nueva ilustración desde la fe cristiana que nos enseñe a pensar, a buscar la Verdad, a encontrar la meta de la vida, y poder dar respuesta a la gran pregunta: quien soy yo, de donde vengo y a donde voy.

            Juan García Inza

          Juan.garciainza@gmail.com