Atacado en Francia por dos musulmanes porque él estaba comiendo un bocadillo de jamón
por Wiederholen
Hace unos años, los taxistas musulmanes en el aeropuerto Minneapolis comenzaron a negarse a transportar pasajeros que llevaban alcohol. Se convirtió en una gran controversia, ya que algunos activistas anti-Yihad comenzaron a preguntarse si los conductores de taxi podían aplicar en los EEUU las normas de la Sharia a sus clientes no musulmanes. Se discutió si un taxista musulmán podía negarse a transportar un pasajero que llevasen bebidas alcohólicas o bocadillos de jamón. Ahora el tema se ha derivado a las agresiones de musulmanes contra no musulmanes en Occidente con el objetivo de implementar la ley islámica.
El 8 de junio de 2013 un joven de 23 años de edad presentó una denuncia después de haber sido atacado la noche anterior a las 9.30 horas, en un tranvía de la ciudad de Reims (Marne) por dos desconocidos. Los dos atacantes, que afirmaban ser musulmanes golpearon al joven varias veces en la cara, ya que estaba comiendo un bocadillo de jamón aduciendo que se sintieron ofendidos por este consumo de carne de cerdo en frente de sus ojos antes de atacarle. Un testigo, un amigo del joven que estaba presente cuando ocurrió el incidente, ha sido entrevistado por los investigadores y se ha confirmado la realidad de la agresión. Todavía no han sido localizados estos seguidores de Muhammad ya que huyeron. La policía está examinando las cintas de circuito cerrado de televisión en el tranvía.
Los fieles más devotos del Islam, los islamistas, se sienten poseídos del derecho de implementar el Islam en tierras de “infieles” y de decidir el qué es correcto y lo que no lo es.
El supremacismo islamista inspira las acciones de los creyentes más fervientes del Islam, y con la potestad de decidir que credo tiene el derecho de existir (el Islam) y cuales no (el resto).
Este supremacismo religioso es el que inspira las acciones de los yihadistas, de la opresión, discriminación contra la minoría cristiana en el mundo musulmán [Dar al Islam]
.Recientemente, el Gran Imán de
La actitud de los líderes del islamismo se podría resumir en esta frase: “Soy pacífico, pero si me dices que soy violento, te mato en nombre de Alá”
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