¡Qué miércoles tan emocionante!
¡Qué miércoles tan emocionante!
por Duc in altum!
Lo que más me sorprendió, fue cuando el nuevo Papa -sonriendo- pidió que se hiciera una oración por él. De entrada, es un gesto muy importante que nos abre a una nueva etapa en la vida de la Iglesia. Hay que darle tiempo, sin embargo, está claro que se trata de un hombre convencido, abierto, sincero y, por si esto fuera poco, ¡buen comunicador! Aunque la nacionalidad no es lo más importante, no deja de ser un hecho histórico que se trate del primer Papa latinoamericano. Yo -en un rincón- pude hincarme y, desde ahí, agradecer a Cristo la unidad del colegio cardenalicio y la llamada a la evangelización que nos ha hecho el Papa jesuita, Francisco. Ya he regresado al ritmo normal de trabajo. De hecho, en unos minutos entraré a una junta. ¡No sé si podré con tanta emoción!, sin embargo, la fe se vive en lo cotidiano, ¡incluso en las intrincadas relaciones laborales! Por lo pronto, le damos la bienvenida al 266 Vicario de Cristo.