Termómetro: 300 misioneros muertos en 10 años, otra masacre en Nigeria, cristianos en Siria y más...

 

            Si hoy es sábado, esto es el Termómetro de persecución religiosa, con los siguientes escenarios.

 

            En Egipto. Según informa The Australian, un tribunal cairota han confirmado las condenas a muerte en ausencia de siete cristianos coptos por su participación en la película “La inocencia de los musulmanes” que el pasado mes de septiembre causó la indignación y disturbios en muchos rincones del mundo musulmán, con un balance de treinta muertos. Los condenados viven en Estados Unidos. El pastor norteamericano Terry Jones, al decir de algunos instigador de la filmación, habría visto reducida su condena de pena capital a cinco años.

 

            En Irán. Según informa ABC, la ONU pide a Irán que no ejecute a cinco miembros pertenecientes a la perseguida comunidad árabe ahwazi, condenados por el genérico delito que ya hemos tenido ocasión de conocer en este Termómetro que se da en llamar “enemistad hacia Dios” (ver Termómetro del 26 de enero) y en el que cabe todo. Mohamad Ali Amuri, Sayed Yaber Alboshoka, Sayed Mojtar Alboshoka, Hashem Shabain Amuri y Hadi Rashidi, fundadores del instituto científico y cultural Al Hiwar, fueron detenidos en Ahwaz en 2011 cuando se aproximaba el sexto aniversario de las protestas masivas de los ahwazi.

 

            Sin salir de Irán. El pastor Saeed Abedini (ver Termómetro del 26 de enero) ciudadano norteamericano al que nos referíamos en nuestro pasado Termómetro, ya no se encuentra en la cárcel de Evin, donde estaba siendo juzgado, y se halla en paradero desconocido. Abedini se enfrenta a una pena de prisión perpetua o incluso de muerte acusado de proselitismo por regentar un orfanato para niños desfavorecidos. Casado con la norteamericana Naghmeh Abedini tras convertirse al cristianismo en 2000, Abedini, tiene dos hijos. “Saeed sufre intensos dolores por los golpes que ha sufrido en los interrogatorios realizados en el que era su pabellón carcelario hasta este momento, y un traslado le permitiría recibir mejor atención médica”, ha declarado la ACLJ que lleva su defensa, pero la falta de información sobre su paradero hace que exista preocupación.

 

            En las misiones del mundo. Según el informe que emite anualmente la Agencia Fides, desde el año 2000 son trescientos los misioneros asesinados en el mundo, cifras que no incluyen, según se especifica, la gran matanza de eclesiásticos durante el genocidio ruandés de 1994. Sólo en 2012 se asesinaron doce misioneros, diez sacerdotes, una religiosa y una laica, de los cuales seis en América, cuatro en Africa y dos en Asia, una cifra que, sin embargo, representa el número más bajo en dos décadas.

 

            En Tanzania. Según la agencia Compact Direct News, el joven de 23 años Yusuf Abdalla ha tenido que huir de Zanzíbar hacia Tanganica a causa de su conversión al cristianismo, tras recibir una brutal paliza y de recibir amenazas de muerte por su familia por parte de miembros de su familia que le despojaron de la máquina de coser con la que se ganaba la vida. Juma Suleiman, convertido al cristianismo por un pastor evangélico mientras estaba en prisión, ha recibido también amenazas de muerte por parte de su familia. En Kiembesamaki, la joven de 28 años Ramadhan Hunda Tuma, convertida igualmente al cristianismo, prefirió declararse culpable y afrontar una sentencia de 24 meses de cárcel por quemar un Corán por error, que quedar en libertad y enfrentarse a una turba que presenciaba el juicio y que la quería linchar a su término.

 

            Tanzania es el producto de la unión de la Tanganica continental y la Zanzíbar insular, de las que recibe su nombre. En la isla de Zanzíbar, la religión claramente mayoritaria es el islam, y los pocos cristianos viven en una situación de cierto miedo. En la Tanganica continental, la población se reparte entre cristianismo e islam, con una ligera mayoría de cristianos y sin problemas reseñables de coexistencia.

 

            En Siria. Según refiere AsiaNews, Parla Issam Bishara, director de la Catholic Near East Welfare Association (Cnewa) ha declarado que “el extremismo islámico amenaza con transformar Siria en un nuevo Irak”, citando los casos de Homs y Qusayr, donde los islamistas han expulsado a las familias cristianas de sus viviendas. Cnewa ayuda a cuatro mil familias víctimas de las bombas y los robos por parte de los extremistas islámicos, algunas en sus propias ciudades y otras en Líbano, adonde acuden los cristianos en busca de refugio y donde su situación no es mucho mejor. “La vida de los cristianos está en peligro y los refugiados en Líbano no tienen derecho a la ayuda internacional” afirma Bishara.

 

            Sin salir de Siria pero en Jordania. Según informa AsiaNews, seis hermanas combonianas dirigidas por la hermana Alessandra Fumagalli socorren a diez mil prófugos sirios hambrientos y sedientos, muchos de ellos niños y mujeres embarazadas, que se han adentrado a pie cientos de kilómetros en el desierto jordano, en el Hospital Italiano de Karak, a 150 kms. de la capital Amman, único centro mínimamente capacitado en toda la zona para una ayuda de este tipo. Fundado en 1939, el Hospital Italiano de Karak, que apenas dispone de cuarenta camas y ochenta empleados, está regentado por la Catholic Near East Welfare Association (Cnewa), la agencia especial del Vaticano para la asistencia en Medio Oriente. En el último año hasta 300.000 sirios han traspasado las fronteras siro-jordanas, y aunque Jordania ha creado campos de refugiados, éstos apenas pueden alojar a la mitad de los que lo necesitan.

 

            En Nigeria. Según informa persecution.org, que a su vez cita a bosnewslife.com, y ante la general indiferencia de los grandes medios mundiales de comunicación, veintitrés cristianos fueron masacrados en el pueblo de Damboa, en el estado de Borno, y en la ciudad de Kano, presumiblemente por militantes del grupo terrorista islamista Boko Haram, que les acusaban de haber transgredido la sharía por conductas tales como comer alimentos prohibidos como cerdo.

 

            La situación en Nigeria, suficientemente conocida para los lectores de este Termómetro, se agrava por la decisión del presidente cristiano del país, Goodluck Jonathan, de participar con 1.200 soldados en la operación llevada a cabo en Mali contra el islamismo radical que pretende imponerse en el país.

 

            En Corea del Norte. Según informa Christian Solidarity Worlwide, la Cámara de los Lores británica ha debatido sobre los derechos humanos en Corea del Norte, y ha pedido al Gobierno británico que impulse una investigación internacional sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos en el país. Lord Alton de Liverpool, presidente del All Party Parlamientary Group (APPG), presentó un informe detallado de los atentados contra los derechos humanos cometidos por el régimen norcoreano, con persecución sistemática de los cristianos y otros abusos contra la libertad religiosa, ejecuciones, abortos forzados y torturas a disidentes. La baronesa Cox de Queensbury, vicepresidenta de la APPG, hizo un llamamiento para la creación de una Comisión de Investigación de las Naciones Unidas.

 

            En Malasia. Según informa Protestante Digital, el grupo malayo islamista Perkasa, que tiene vínculos con el gobernante partido Organización Nacional de Malayos Unidos (UMNO), ha amenazado con una quema pública de biblias en la ciudad de Butterworth, para borrar todo vestigio de la palabra Alá en ellas, ya que según los extremistas musulmanes y también el sultán de Selangor (ver Termómetro del 19 de enero), el término sólo puede ser utilizado por musulmanes.

 

            En diciembre de 2009 y en un juicio contra una revista que utilizaba la palabra, el Tribunal Supremo dictaminó que el uso de la palabra “Alá” no se podía limitar a los musulmanes, y que los cristianos también tenían derecho a usarlo. La sentencia, recurrida por el Gobierno, provocó un estallido de violencia contra los cristianos, que durante 2010 sufrieron ataques en sus templos y escuelas, y el Gobierno confiscó biblias en la lengua malaya en los estados del este. El tema retorna ahora ante la inminencia de las elecciones, en las que el UMNO se enfrenta a acusaciones de corrupción a gran escala y otros escándalos. Los cristianos malayos constituyen el 9,2% de una población de 28 millones de habitantes, y todo ello ocurre con una Constitución que garantiza la libertad religiosa.

 

            En Cuba. Y para terminar la buena noticia. Según informa Religión en Libertad, el Gobierno cubano ha autorizado la devolución a la Iglesia Católica de una serie de bienes inmuebles en la diócesis de Bayamo-Manzanillo, en la provincia suroriental de Granma, entre los cuales el edificio en el que estuvo instalado el colegio Divina Pastora, nacionalizado por Fidel Castro en 1961, la capilla de San Tarsicio, construida en los años 50, y dos terrenos para la construcción de sendas capillas en el municipio de Río Cauto.

 

            En los últimos años se ha entrado en una nueva etapa de distensión en las relaciones entre la Iglesia Católica y el Gobierno cubano. Según los datos del Arzobispado de La Habana, un 60% de la población cubana se considera católica, y hay unos 650 templos, 340 sacerdotes y unas 600 religiosas.

 

 

 

 

 

 

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