Del aborto y UNICEF
por Luis Antequera
Cuando ayer denunciábamos en esta columna la política de “salud sexual y reproductiva” desplegada desde una ONG tan inesperada en este sentido como lo es Médicos Sin Fronteras, salió inevitablemente a la palestra la acusación que de actuar en parecida dirección se hace recurrentemente cuando de otra importante ONG se trata: UNICEF.
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| UNICEF en Níger | UNICEF en Chad |
Me he preocupado en buscar documentación al respecto, y lo que me he encontrado, para mi grata sorpresa, es el siguiente comunicado emitido por la organización el 13 de abril de 2009, que reproduzco para Vds. en su integridad:
“UNICEF Comité Español lamenta las repetidas alegaciones difamatorias que se lanzan con cierta frecuencia contra esta organización. UNICEF Comité Español quiere trasladar a la opinión pública que UNICEF ni apoya ni ha apoyado nunca la práctica del aborto y, en consecuencia, UNICEF no destina fondos de ningún tipo a esta práctica en ningún lugar del mundo.
Los valores del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, están firmemente asentados, por mandato de la Asamblea General de Naciones Unidas, en la Convención sobre los Derechos del Niño. En función de ese mandato, desde hace más de 60 años la misión de UNICEF es la de asegurar que todos los niños y niñas tengan la oportunidad de sobrevivir y prosperar, desde la primera infancia hasta la adolescencia. La acción de UNICEF también se ocupa de que las madres reciban la atención necesaria durante su embarazo y su periodo de lactancia y las apoya para que estén sanas y puedan criar a sus hijos en condiciones que garanticen los derechos de la infancia.
Para velar por el desarrollo de su misión, UNICEF está gobernada por una Junta Ejecutiva en la que están representados Gobiernos de todo el mundo: entre ellos, Estados Unidos y la Santa Sede. Las políticas que define esa Junta Ejecutiva son claras:
1. Darle a cada niño la mejor entrada en la vida apoyando cuidados sanitarios prenatales para las mujeres, promoviendo la lactancia materna y proporcionando cuidados básicos sanitarios, nutricionales, agua limpia, saneamiento y un entorno de cuidado y protección para la infancia.
2. Inmunizar a todos los niños contra las enfermedades infantiles, así como proveer de suplementos nutricionales como la vitamina A y sal yodada que estimulan los sistemas de inmunización de los niños y ayudan a un desarrollo saludable.
3. Asegurar una educación básica de calidad para todos los niños y niñas, poniendo especial énfasis en que tanto niños como niñas tengan igualdad de oportunidades para ir a la escuela, y en que tanto los niños como las niñas reciban el mismo apoyo y el mismo estímulo para permanecer en la escuela.
4. Prevenir la infección de VIH/SIDA entre la gente joven apoyando tanto al gobierno como a las comunidades para asegurarse de que los jóvenes saben como protegerse, con especial énfasis en el enfoque ABC (siglas en inglés que significan abstinencia, fidelidad y uso de preservativo). UNICEF también trabaja en la prevención de transmisión de VIH madre-hijo y en la atención y apoyo necesarios para los 14 millones de niños que han quedado huérfanos a causa del SIDA.
5. Asegurar la protección de los niños frente a la explotación, violencia y abuso, apoyando los esfuerzos nacionales necesarios para crear un entorno protector para la infancia.
Atendiendo a estas directrices, definidas por la Junta Ejecutiva de UNICEF, el Comité Español del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, quiere insistir en que:
- UNICEF no destina fondos a la práctica del aborto ni a servicios abortivos, y tampoco apoya el aborto como método de planificación familiar.
- UNICEF apoya el enfoque ABC (siglas en inglés que significan abstinencia, fidelidad y uso de preservativo) para la lucha contra el SIDA. El enfoque ABC se considera en todo el mundo como un enfoque que salva vidas.
- UNICEF trabaja por el bien de toda la infancia. Cuando UNICEF denuncia temas específicos de niñas, es porque las niñas están siendo afectadas particularmente. Por ejemplo, UNICEF trabaja para conseguir una educación básica de calidad para la infancia, pero pone énfasis especial en que las niñas vayan a la escuela porque son las que actualmente no van.
- UNICEF es un aliado orgulloso de múltiples y muy diversas organizaciones en todo el mundo. UNICEF trabaja con miles de organizaciones religiosas, incluyendo la Iglesia Católica. La estrecha relación de UNICEF con la Iglesia Católica abarca todo el mundo, pero es más fuerte en Latinoamérica, donde la Conferencia Episcopal tiene un acuerdo permanente con UNICEF y está activamente involucrada en el trabajo del Fondo de Naciones Unidas en defensa de los derechos de la infancia.
Para más información
Dirección de Comunicación UNICEF Comité Español.- 91 378 95 58”.
El comunicado me parece suficientemente tajante, y aporta argumentos (la colaboración con la Iglesia Católica, etc.) que lo convierten, además, en convincente.
No tiene mucho sentido practicar abortos y luego emitir un comunicado tan contundente como el presente negando hacerlo, cuando además, por triste que sea reconocerlo, los que practican abortos navegan hoy a favor de corriente, sin parecer que tengan que hacer otra cosa que recurrir a su envenenada terminología (“salud sexual”, “salud reproductiva”, “derechos de las mujeres”), para expresarse, ahorrándose así explicarnos que lo único que hacen es, literalmente, matar niños en el vientre de sus madres.
No tiene mucho sentido practicar abortos y luego emitir un comunicado tan contundente como el presente negando hacerlo, cuando además, por triste que sea reconocerlo, los que practican abortos navegan hoy a favor de corriente, sin parecer que tengan que hacer otra cosa que recurrir a su envenenada terminología (“salud sexual”, “salud reproductiva”, “derechos de las mujeres”), para expresarse, ahorrándose así explicarnos que lo único que hacen es, literalmente, matar niños en el vientre de sus madres.
El solo hecho de que UNICEF emita un comunicado como el presente demuestra algo que empezaba a parecer inverosímil, a saber, que otra manera de realizar cooperación internacional es posible. Y que practicar abortos no es, como algunos nos quieren hacer creer, algo sin lo cual no se puede hacer el bien en el Tercer Mundo.
Vaya por delante pues, mi reconocimiento a UNICEF. Personalmente, prefiero creerles. No sólo prefiero: “puedo” creerles: la rotundidad del comunicado, los argumentos aportados, me parecen suficiente aval para hacerlo. El solo hecho de emitirlo, un triunfo de los que estamos por y con la vida.
©L.A.
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