Santa Ángela de la Cruz y el beato Narciso de Esténaga

Del 15 al 21 de mayo de 1929 tuvo lugar en Sevilla el Congreso Mariano Hispano-Americano. El último día se celebró una solemne misa en sufragio de los descubridores y colonizadores de América.

A las diez de la mañana, en el alta mayor de la Catedral de Sevilla, presidió un pontifical el arzobispo de Lepanto, nuncio de Su Santidad en España, monseñor Federico Tedeschini. Se cantó la misa de Nuestra Señora de los Remedios.

La oración fúnebre por los descubridores estuvo a cargo del prior de las Órdenes militares, obispo de Ciudad Real, beato Narciso de Esténaga, mártir de la persecución religiosa en el verano de 1936.

"La oración fue transmitida por radio y comunicada por altavoces a todos los extremos del templo", explica ABC, al día siguiente, 22 de mayo de 1929. "Dedicó elocuente elogio a la labor realizada en América por los descubridores y colonizadores, que fueron guiados por la fe de Cristo. Terminada la ceremonia, se cantó solemne responso ante el monumento que guarda las cenizas de Cristóbal Colón".

Como nos recuerda, Francisco del Campo Real, canónigo de la Catedral de Ciudad Real y Presidente de la Comisión Histórica de la Causa martirial que se instruye en la Provincia eclesiástica de Toledo, la intervención que lleva por título Solemne y piadoso homenaje a los descubridores y colonizadores de América, fue publicada en la Crónica Oficial del Congreso Mariano Hispano Americano de Sevilla, del 15 al 21 de mayo de 1929, páginas 317 – 333, Imprenta Saéz Hermanos (1930, Madrid) [Francisco DEL CAMPO REAL, El Obispo Narciso de Esténaga y diez de sus diocesanos mártires, 2007, pág. 28].

Con casi total certeza, fue en este viaje cuando el Obispo mártir se fotografía con Santa Ángela de la Cruz. Ella fallecería tres años después, el 2 de marzo de 1932. Él alcanzó la palma del martirio el 22 de agosto de 1936.

Las hermanas de la Cruz, que hoy celebran la fiesta de su santa fundadora, han recogido en tradición oral que don Narciso, mientras estuvo con ellas le entregó su anillo episcopal para que lo portara la que se había hecho rica, ante Dios, sirviendo a los más pobres.

Que ellos, rueguen por nosotros, desde el Cielo.

Ya, en 2017, publicamos: ¿Qué hacían las Hermanas de la Cruz en 1936?

https://www.religionenlibertad.com/blog/59776/que-hacian-las-hermanas-cruz1936-.html

https://www.religionenlibertad.com/blog/59862/que-hacian-las-hermanas-cruz1936-.html