Sin rejas ni defensas
En las favelas que visitará el Papa en Rio le enseñarán su pobreza real, «sin maquillaje»
La programación del papa Francisco durante la Jornada Mundial de la Juventud Río2013 incluye una visita a la parroquia de Varginha, situada en la favela de Manguinhos, una de las más pobres de Río.
Allí el Santo Padre deberá conducir una oración en la parroquia de San Jerônimo de Emiliani en donde bendecirá el nuevo altar.
Además conversará con líderes de la comunidad y sus habitantes, caminará por una calle de Varginha hasta una cancha de fútbol en donde habrá un palco para que dirija unas palabras a los pobladores.
No habrá particulares rejas o defensas y si el Papa quiere podrá entrar incluso en alguna de las casas.
La visita está prevista para el día 25 de julio por la mañana y el detalle de la programación fue dado a conocer este sábado 18, por el arzobispo de Río de Janeiro, Don Orani Tempesta, quien presidió una misa en dicha iglesia.
“Mientras la calle José Carlos Chagas, por donde el santo padre va a pasar se transforma en un ´tapete rojo´, con nuevo asfaltado y desagues pluviales, las favelas vecinas esperan una gracia del poder público”, escribe un diario local que titula “Milagro del Papa en Manguinhos”.
La encargada de prensa internacional Inés San Martín, le indicó a ZENIT que “la calle por la que caminará el papa aún no fue confirmada, no hemos hecho ningún comunicado al respecto, pero sí es cierto que en Manguinhos ya iniciaron algunos trabajos por donde se supone que el santo padre deba pasar”.
Añadió que durante su estadía en Río el papa inaugurará además un ala del Hospital San Francisco, en el barrio Tijuca, para tratamientos en favor de los toxicodependientes.
“Es una alegría y una responsabilidad mostrar cuánto la Iglesia continúa viva y trabajando silenciosa en las comunidades para que podamos cumplir con la misión que el Señor nos confió”, indicó el párroco local, Marcio Queiroz en declaraciones publicadas en la página web de la JMJ.
Precisó que la comunidad le mostrará la realidad al papa Francisco: “No tiene sentido crearnos algún tipo de maquillaje. La simplicidad que están viendo es la que vamos a mostrarle. Este es el rostro de esa parroquia”.
El arzobispo de Río consideró que lo más importante será el legado social que quedará para la población. El proceso de elección de la comunidad fue complejo, explicó don Orani, y que para ello la pastoral de las favelas de la Archidiócesis presentó una lista con más de 750 parroquias. A continuación el Comité Organizador Local, el gobierno de Río y el Vaticano buscaron un lugar ya pacificado, que aún no hubiera sido visitado por Juan Paulo II.
“Sería muy bueno que el papa pudiera pasar en todas las favelas. Aquello que se hace despierta a las personas para que quieran mejorar su vida”, añadió.
Las favelas pacificadas son las que vieron extirpado el narcotráfico, con una pesada intervención del ejército brasileño y la policía, en la que no faltaron ni siquiera los tanques.
Hoy las ´unidades de pacificación´ de la policía patrullan 13 favelas, algunas de las cuales eran impenetrables, y son parte de un plan de seguridad nacional.
La capilla de San Jerónimo Emiliani nació de un deseo de los padres somascos de evangelizar una comunidad carente, del punto de vista social y espiritual. Los sacerdotes de la orden de San Jerônimo Emiliani llegaron de Italia en misión para edificar una casa de la orden.
Pasando por la favela de Varginha encontraron que existía deseo de Dios en sus habitantes. Ellos participaban de las misas en otra comunidad, San Daniel, también localizada en Manguinhos. Fue entonces que los padres somascos, construyeron la iglesia que fue inaugurada en 1971, con la presencia del entonces arzobispo de Río de Janeiro, don Eugenio Salles.
En 1972, la Madre Teresa de Calcuta en su visita a Brasil, caminó por las calles de la comunidad y visitó algunas casas A partir de ahí, la comunidad abrió un espacio para que las hermanas de la caridad realizaran sus obras, como la catequesis de niños y visitas a las familias.