Lunes, 23 de diciembre de 2024
portada
blogs
papa francisco
españa
américa
libros
otras noticias
vídeos
opinión
libros rel
DONA AHORA
SUSCRÍBETE
historias de conversión
historias de evangelización
Vida y familia
Europa
EEUU
Mundo
Personajes
Polémicas
Ciencia y Fe
Cultura
Nueva Evangelización
Vaticano
Villancico vaquero del Hogar Jesús Niño
«Noche de paz» de los misioneros españoles
¿Qué distingue a un belén «napolitano»?
Hermanos Galindo: oraciones infantiles
Impresionante «Christmas is you»
Los secretos de la Basílica de San Pedro
Los «monstruitos» ideologizados
«Quiero adorarte», un bello villancico
Sin fe común, ¿de qué esperanza hablamos?
Suárez, «uno de los grandes del siglo»
Alzacuellos: su particular origen
Milagros de ahora, hablan los milagrados
Miles de niños sembrando estrellas
Raphael en Linares: «El tamborilero»
ACdP: Dios ha nacido, y no es un cuento
Luz en la oscuridad, villancico de Fomento
Youtuber judío enseña la Domus Galilaeae
«Monumento» de Iberia a la familia
Cura y músico en el grupo IXCÍS
Juan Arana: la frontera ciencia-fe
Evangelio del día
Ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban
No desprecian a un profeta más que en su tierra
Pon las manos sobre ella, para que se cure y viva
Anuncia a los tuyos lo que el Señor ha hecho contigo
Le empujaron hacia un barranco para despeñarlo
El Niño se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba
A sus discípulos se lo explicaba todo en privado
La medida que uséis la usarán con vosotros
Cuando viene una persecución por la palabra, en seguida sucumben
Mira, tu madre y tus hermanos están fuera y te buscan
Una familia dividida no puede subsistir.
Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír
Se juntó tanta gente que no los dejaban ni comer
Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos
Los que sufrían de algo se le echaban encima para tocarlo
Se pusieron a planear el modo de acabar con él
El Hijo del hombre es señor también del sábado
Mientras tienen al novio con ellos, no pueden ayunar
Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora
No necesitan médico los sanos, sino los enfermos
El Hijo del hombre tiene potestad para perdonar pecados
Para que conste, ve a presentarte al sacerdote
Curó a enfermos de diversos males y expulsó muchos demonios
¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno?
Venid conmigo y os haré pescadores de hombres
Mientras oraba, bajó el Espíritu Santo sobre él
El amigo del esposo se alegra con la voz del esposo
El solía retirarse a despoblado para orar
Se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios
Entró en la barca con ellos, y amainó el viento
43
44
45
46
47
48
49
50
51