Tres semanas después de los atentados de Pascua, las iglesias y escuelas de Sri Lanka abren de nuevo
Desde la ola de atentados del Domingo de Pascua, el 21 de abril, en Sri Lanka, iglesias, escuelas religiosas y otros espacios públicos han permanecido cerrados o con sus horarios alterados, por los duelos, funerales y por miedo a más atentados.
Poco a poco vuelve la normalidad al país. Las escuelas católicas de Sri Lanka volverán a abrir sus puertas este 14 de mayo, según anunció el cardenal Malcolm Ranjith, arzobispo de Colombo, después de una reunión entre los 12 obispos y el presidente Maithripala Sirisena, celebrada en Colombo el 9 de mayo.
Según recoge la agencia Fides, el cardenal Ranjith también anunció que las liturgias dominicales se reanudarán regularmente en todas las iglesias católicas de Colombo a partir del 13 de mayo.
Los atentados yihadistas mataron a 258 personas e hirieron a unas 500 más.
Primera misa al aire libre
En la noche del 16 de mayo se celebrará una misa especial en Negombo, al norte de la capital, para conmemorar a las víctimas. "Será la primera vez, después de la explosión en la iglesia de San Sebastián en Negombo, donde murieron más de 100 personas, que se celebrará una misa al aire libre", dijo el cardenal Ranjith.
Las escuelas dirigidas por la Iglesia habían sido cerradas para preservar a los estudiantes, por temor a nuevos ataques. Todas las escuelas públicas -más de 10.000 en total- reanudaron sus clases el 6 de mayo después de que la policía y las fuerzas de seguridad desplegaran guardias armados frente a las escuelas, aunque la asistencia de los estudiantes fue bastante baja.
El gobierno acusó de los ataques a un grupo local, el National Thowheeth Jama'ath (NTJ), el cual declaró su lealtad al Estado Islámico.
Más de 50 detenidos
"La ofensiva contra los extremistas islámicos está progresando con éxito", dijo la oficina del presidente Sirisena. La policía de Sri Lanka afirma haber matado o detenido a todos los responsables de los ataques. Al menos 56 sospechosos están bajo custodia, dijo la policía.
Sri Lanka es un país con 22 millones de habitantes, en su mayoría budistas, pero que incluye minorías de cristianos, musulmanes e hindúes. Los musulmanes representan casi el 10% de la población; los cristianos son el 7,4% (6,1% católicos y 1,3% protestantes).
El país mantiene las secuelas de una guerra que finalizó hace casi diez años y que duró 37 años contra los separatistas tamiles (de religión hindú, frente a la mayoría cingalesa, que es de religión budista).