En noviembre del año pasado, Pizzaballa pidió ayuda para Tierra Santa: contamos lo que recaudó

El Patriarcado Latino de Jerusalén ha difundido los datos de los donativos que ha recaudado durante un año, a raíz de la crisis desatada por la guerra de Gaza. Han recogido 10,3 millones de dólares (9,7 millones de euros), de los que casi una cuarta parte han llegado a través de la Orden del Santo Sepulcro y sus capítulos locales repartidos por todo el mundo.

El Patriarca Latino de Jerusalén, el cardenal Pizzaballa, en un informe sobre los fondos y su destino, explica: «La confianza genera respeto por la dignidad de cada ser humano; esa confianza es la que hemos intentado proteger, animar y reconstruir, cuando las tragedias nos han hecho conscientes de qué no solo tenemos que cuidar a los pequeños del Evangelio, sino parecernos a ellos».

De lo recaudado, 6 millones se han dedicado a Gaza y el resto a Jerusalén y Cisjordania.

Sami El-Yousef, director de Operaciones del Patriarcado, explica en el informe que los primeros en responder fueron las Cáritas de países europeos, aunque sus fondos estaban muy ligados a operaciones concretas (becas, sanidad, etc…). En una segunda fase llegaron los donativos de la Orden del Santo Sepulcro de distintos países. Después, en noviembre de 2023, el cardenal Pizzaballa hizo una petición especial de donativos, y así llegaron más fondos, que se podían dirigir con más rapidez a ayudas urgentes.

De lo recaudado, 4,3 millones se destinaron a intervenciones en Cisjordania y Jerusalén, mientras que 6 millones se utilizaron para apoyar a la población de Gaza. En total, más de 140.000 personas fueron ayudadas.

El cardenal Pizzaballa contempla los destrozos en Gaza en verano de 2024.

La ayuda en Gaza

Lo que se ha entregado en Gaza a través de la parroquia católica de la Sagrada Familia ha apoyado a los 700 católicos que siguen allí (hay unos 300 que dejaron la zona) y a otros 250 cristianos de la parroquia ortodoxa de San Porfirio, además de a miles de familias vecinas de ellos, que son de religión musulmana.

El Patriarcado recuerda que Gaza, que tenía 1,2 millones de habitantes hace un año, ahora solo tiene 400.000, y está arrasada. La Escuela de la Sagrada Familia, el Centro Santo Tomás de Aquino y el orfanato de las Hermanas de la Caridad fueron destruidos, al igual que muchas viviendas particulares de los parroquianos. La parroquia de Gaza reparte toneladas de comida cada mes: en agosto, 60 toneladas; en septiembre, 80; en octubre, otras 80; en noviembre, ya 100 toneladas.

Lo que se ha entregado en Gaza a través de la parroquia católica de la Sagrada Familia ha apoyado a los 700 católicos que siguen allí (hay unos 300 que dejaron la zona) y a otros 250 cristianos de la parroquia ortodoxa de San Porfirio, además de a miles de familias vecinas de ellos, que son de religión musulmana.

El Patriarcado recuerda que Gaza, que tenía 1,2 millones de habitantes hace un año, ahora solo tiene 400.000, y está arrasada. La Escuela de la Sagrada Familia, el Centro Santo Tomás de Aquino y el orfanato de las Hermanas de la Caridad fueron destruidos, al igual que muchas viviendas particulares de los parroquianos. La parroquia de Gaza reparte toneladas de comida cada mes: en agosto, 60 toneladas; en septiembre, 80; en octubre, otras 80; en noviembre, ya 100 toneladas.

Proyectos en Cisjordania

En Cisjordania y otras zonas se ha apoyado a los desplazados o necesitados. El sistema de ayudas médicas del Patriarcado ha alcanzado a 20.000 personas; también ha aportado ayuda directa a 40.000 desplazados y ha mantenido becas de estudios para 8.000 estudiantes. Se han creado unos 4.000 puestos de trabajo de emergencia para las familias más dañadas por las crisis. Unas 5.000 familias han recibido ayudas para el alojamiento y 5.000 bebés han recibido paquetes de productos básicos. La atención para prepararse ante el invierno ha alcanzado a 10.000 personas.

Mucho de lo recaudado se ha gastado en cupones de comida, dinero en metálico, gastos médicos, gastos escolares y asistencia social para pagar alquileres, especialmente para las familias de Tierra Santa que no podían trabajar por la crisis y los bloqueos. También se ha ayudado a muchos inmigrantes de otros países (africanos y asiáticos, cristianos muchos de ellos) especialmente golpeados por la crisis. La crisis por la guerra es dura para todos, pero los inmigrantes no tienen el apoyo de sus familias, que son pobres y están lejos.

Recaudación del Patriarcado Latino de noviembre de 2023 a noviembre 2024 para ayudar por la guerra en Tierra Santa, y destinos de las ayudas.

¿Quién da más dinero? Desde España, sólo Manos Unidas

Entre las entidades que han aportado más ayuda a través del Patriarcado encontramos sólo una entidad española, Manos Unidas, la agencia de ayuda internacional de la Iglesia española. Otras entidades que, como Manos Unidas, han superado los 50.000 dólares son: la diócesis de Colonia, el episcopado checo, el consulado de Francia en Jerusalén, el obispado de Alguer (en Córcega, con el cardenal hispano-francés Bustillo), la diócesis italiana de Bérgamo (de dónde procede el Patriarca Pizzaballa), la de Westminster, Ayuda a la Iglesia Necesitada Alemania, Comunión y Liberación ...

Entre las entidades que han donado más de 10.000 pero menos de 50.000 hay varias diócesis inglesas, italianas, norteamericanas, la portuguesa Setúbal, varias parroquias, el episcopado polaco... pero no hay entidades españolas ni hispanoamericanas. Sí figuran como donantes generales generosos capítulos locales de la Orden del Santo Sepulcro en España.

Los donativos directos de individuos de distintos países a la cuenta del Patriarcado sumaron un total de 260.000 dólares.

El informe detalla que también la Orden de Malta y su ONG Malteser International están haciendo una gran tarea en Tierra Santa, pero que sus actividades no se recogen este informe, que se centra en lo vehiculado a través del Patriarcado.

(Publicado originariamente en Fundación Tierra Santa, a partir del informe del Patriarcado Latino de Jerusalén)