¿Qué fue de Myriam, la niña cristiana de Irak que se hizo viral perdonando a los yihadistas de ISIS?

En 2014 se hizo viral un emocionante vídeo protagonizado por Myriam (o Maryam) Waleed Behnam, una niña cristiana de 9 años de  Qaraqosh, la mayor ciudad cristiana de Irak, desplazada a un campo de refugiados en el Kurdistán. Hablaba en el programa del canal cristiano en árabe SAT7, cuya programación infantil ella seguía asíduamente.

- Dios nos quiere, no dejará que ISIS nos mate. Dios nos ama a todos, no solo a mí –explicaba al locutor.

- ¿Cuáles son tus sentimientos hacia aquellos que te han echado de tu casa?- le preguntaban.

- Yo no quiero hacerles nada, sólo le pediré a Dios que les perdone.

- ¿Y tú les vas a perdonar?

- Sí.

- Pero es muy complicado. ¿O acaso es fácil perdonar a quien te ha hecho sufrir?

- No quiero matarles. ¿Para qué matarles? Sólo estoy triste porque nos sacaron de nuestras casas. ¿Por qué hicieron eso?

Después explicaba que había perdido a su amiga Sandra. "Tenía una amiga antes de llegar aquí llamada Sandra. Solíamos hablar y estar juntas todo el día. No vivíamos cerca pero nos queríamos mucho. Si alguna de las dos hacíamos daño a la otra, nos perdonábamos. Ahora yo solo quiero verla. No sé donde está ahora".

Y hablaba también de su relación con Dios:

- Algunas veces lloro porque hemos dejado nuestra casa pero no estoy enfadada con Dios, aunque ya no estemos en Qaraqosh. Estoy agradecida con Él porque incluso si estamos sufriendo aquí, Él nos provee.

Este reportaje de 2014 con Myriam, en Sat7, se hizo viral

Casi 5 años después

En 2019 Myriam es ya una adolescente y han cambiado cosas en el mundo. ISIS ha sido derrotado en Siria e Irak y muchos cristianos vuelven a sus antiguas poblaciones.

Myriam ya es adolescente y ha podido volver a Qaraqosh

En 2014, ella rezaba pidiendo 3 cosas:

- volver a ir a la escuela (había sido la mejor de su clase)
- encontrar a su amiga Sandra
- volver a su hogar en Qaraqosh

Todo se fue cumpliendo. En Kurdistán, en Erbil, los cristianos pronto lograron reconstruir un sistema educativo propio, en lengua árabe. Y Myriam encontró a su amiga Sandra, que fue su compañera de pupitre. Volver a Qaraqosh no  va a ser fácil para ella ni su familia, pero están en ello.

Myriam y su amiga Sandra consiguieron reunirse poco después de su vídeo de 2014 y han sido compañeras de pupitre en Erbil, en las escuelas de los refugiados

Su madre, Alice, explica a Sat7 lo que vieron al volver a su hogar. “Todo en nuestra casa estaba revuelto. Después vi que otras casas estaban quemadas, destruidas, saqueadas. Nos impresionó ver todos los esfuerzos de nuestra vida destruidos en un día. Casas que habían tenido 50 años, y en un  momento las quemaron o destruyeron”.

Sin embargo, la estructura de la casa familiar de Myriam se ha mantenido bien. Y también se salvó su Biblia familiar.

Reportaje de 30 minutos con Myriam y la vida de los cristianos en Qaraqosh después de ISIS; en el minuto 8, la misa del Lavatorio de los Pies; las iglesias fueron quemadas por dentro y vandalizadas, pero las estructuras aguantaron; en el 25.20, los cristianos en las calles, con trajes y palmas, celebran el Domingo de Ramos

Balas en las paredes... pero Dios en el corazón

Muchas casas de Qaraqosh que no fueron destruidas sí fueron saqueadas, y otras muchas tienen agujeros de balas en las paredes. Los yihadistas dejaron pintadas en una iglesia con el lema “el Califato ISIS permanecerá siempre”. Y dispararon contra una pintura mural de Jesús.

Myriam comenta con los periodistas de Sat7 que “no se trata tanto de la casa, como de lo que sientes en el corazón: que Dios siempre te protege y puedes contar con Él”.

Tras 5 años de exilio y desastres, ¿aún perdona a los yihadistas?

“Por supuesto que los perdono, como os dije", explica al equipo de Sat7. "Amo Qaraqosh. Es donde nací y estudié en mi infancia. Pero lo más importante es que amo ver que la gente cree en Dios”.

Myriam está algo asombrada y emocionada por la relación que ha desarrollado con los años con el director de programación infantil de Sat7, Essam Nagy, y su esposa, Magdoline. Mantuvieron contacto con su familia durante años, con llamadas, oraciones y ánimos, y pudieron acudir a celebrar con ellos la Pascua oriental en Qaraqosh.

Alice, la madre, preparó la comida para los invitados y Waleed, el padre, la bendijo. Todos se vistieron con sus mejores galas para la gran marcha festiva de Pascua en las calles. Miles acudieron al Domingo de Pascua, alegres por empezar a dejar atrás el horror yihadista.

Así fue el pasado Domingo de Ramos en Qaraqosh, recuperada la ciudad y expulsado el Estado Islámico

Poco a poco, la familia de Myriam recuperará la normalidad, aunque queda mucho por hacer en otras poblaciones de cristianos desplazados en Siria e Irak, y en los pueblecitos del norte sigue habiendo bombardeos turcos y “protección no solicitada” de grupos armados kurdos.  Los cristianos de Oriente siguen necesitando la oración y el apoyo de sus hermanos para reconstruir sus vidas.