Te tomo como eres
994. 28 de septiembre. "Considera hoy, amiga Mía, Mi Belleza. Alábala y desea verla. Ofrécela a fin de que el Padre, complacido, renueve a Francia. Yo Soy siempre el que obtiene las cosas. No te canses de ofrecerme, ¿no tienes a tu disposición las Manos de Mi Madre? Como el día que Me ofreció en el templo."
995. 30 de septiembre. Visita. "Es claro que tenéis que ocuparos en cosas variadas a lo largo del día, pero aun esas cosas banales, hacedlas conmigo, cerca de Mí; porque Yo estoy en vosotros siempre y porque esas cosas las hice Yo también mientras viví sobre la Tierra. "Es sumamente sencillo el conversar continuamente conmigo sin dar importancia mayor a vuestras ocupaciones ordinarias. La unión hace que todo tenga el mismo valor espiritual ante Mis Ojos. Nada, hijitos Míos, es vulgar." (Esto me lo dijo porque yo acababa de lavar la vajilla). "Yo puedo divinizarlo todo si vosotros Me lo permitís. Mi Amor está siempre en acecho de todo lo que pueda hacer por vosotros. "Dádmelo pues todo, con la voluntad segura de que Me complacéis. ¡Cuál no será vuestro asombro cuando conozcáis vuestros tesoros! Con piedrecitas pequeñas se pueden hacer magníficos mosaicos."
996. 10 de octubre de 1940. "Estas contenta y Me das las gracias porque se te ha anunciado que podrás entrar de nuevo libremente en tu casa de Nantes: Sin embargo, tu verdadera casa no es esa habitación que es nada más para un tiempo. Tu Morada está en Mi Corazón, es la Patria del Cielo. Allí es donde se dan todas las alegrías, porque allí está la exposición de Mis Amores, Sus Encantos. ¿Comprendes, Mi Gabriela?"
Visita al Santísimo Sacramento. "Te tomo como eres. Déjame hacerlo así. No aguardes a tener el vestido de los domingos. Yo tengo siempre premura por las almas. Por eso, pon en retiro tu alma, sea como sea, ya que puedes hacerlo durante este invierno. Que no se ocupe sino de Mí. Que tengamos los dos dulces momentos, Mi paloma solitaria. Mis Fuegos encenderán los tuyos con una flama más alta." Yo: ''Cuánta querría yo eso, mi Señor!' El: "No te inquietes. Pero arde ante Mi Padre con Mis Ardores, con Mis propias Llamas..."