Despréndete de tu propia voluntad
1343. 3 de diciembre de 1943. Iglesia de Fresne.
Emplea todo este mes en darme las gracias. Un ‘gracias’ de amor es para Mí más dulce de cuanto puedas imaginar. Ya sabes que Soy un Ser sensible y que Me encuentro siempre en un estado de apogeo de Ternura; no debe extrañarte, entonces, que escuche con Alegría vuestras palabras de reconocimiento. Esto lo comprenderías muy bien si tuvieras un conocimiento mejor de lo que es la Divinidad. Porque vosotros juzgáis siempre de Dios según las cualidades del hombre.
Recuerda que por ti misma no eres nada y que eres indigna de Mis Favores. Deja que tu corazón se funda de amor en la consideración de lo que te he dado durante el año en curso; que se incendie en deseos de acercarse más a Mi Santidad. Nada presumas de la eficacia de tus esfuerzos, pero confía firmemente en Mi Ayuda. Y despréndete de tu propia voluntad, incluso en el campo de los bienes espirituales: así estarás en la verdad y éste es el camino más rápido. Yo mismo, siendo Dios, nunca hice otra cosa que la Voluntad de Mi Padre. Ciertamente se encierra un misterio, pero tienes que creerlo. Poco a poco irás encontrando felicidad en renunciar a lo que querías, cuando Mi Voluntad es contraria. Anhela establecerte en la perfección y así vivirás en Mi Morada. Y esto es tu único fin sobre la Tierra.
¡Qué dulce es cuando dos hermanos habitan juntos! Eres muy pequeña; piensa siempre que estás solo al principio del camino y busca Mi Mano, pues tu corazón está necesitado de Fuerza y de Sabiduría.
Una vez Me dijeron Mis Apóstoles: 'Señor, ¿a quién iríamos?' Tú también, ¿a quién podrías volverte si Me dejaras?
Ven pues continuamente hacia Mí, pequeña hija Mía. ¿Tendrías miedo de importunarme a Mí, tu Dios? En Mí y sólo en Mí están siempre el Amor y la Paz. Toma y come. Incorpórate a Mí y no te defiendas de que Yo te ame..."
Gabriela Bossis (1874-1950) fue la menor de cuatro hijos en una familia católica francesa que la educó cristianamente. Se diplomó en enfermería y sirvió como tal en las misiones de Camerún, por lo que fue condecorada. Fue una persona abierta y comunicativa muy entregada a Cristo, pero que no sintió la vocación religiosa. En 1923 escribió su primera comedia, alcanzó celebridad por obras entretenidas y edificantes que se estrenaron en numerosos países, incluso interpretando ella algún papel. En 1936 comenzó a transcribir sus diálogos con el Señor, una experiencia mística que vivió durante años. Fue dirigida espiritualmente por varios sacerdotes, que dieron luego testimonio de su paz interior. En uno de sus cuadernos escribe las siguientes palabras que escuchó de Cristo: "Tú has estado siempre bajo mi dirección". Todos esos escritos se agruparon en volúmenes agrupados bajo el título Él y yo. Murió después de experimentar durante varios meses dolencias respiratorias y pérdida de visión, que sobrellevó con el mismo espíritu de conformidad con la voluntad de Dios que guió toda su vida.