Háblame con sonrisas
412. 28 de marzo. En el tren de Combourg a Nantes trataba yo, con la ayuda de la Santísima Virgen, de curar amorosamente las heridas de Su Frente. Me dijo: "Es una buena obra que haces conmigo." Y luego, refiriéndose a la influencia que puedo tener sobre los demás, añadió: "Comienza a sembrar; Yo haré el resto. Pero, comienza..."
413. 29 de marzo. Le Fresne. Después de la comunión Le decía yo: "Ofréceme a Tu
Padre". Me corrigió con delicadeza: "Nuestro Padre." haciéndome sentir que hasta Su propio Padre Lo comparte con nosotros.
414. 10 de abril de 1938. Viernes, en Montmartre. "Sé Mi pequeña amiga, alegre y gozosa.
Háblame con sonrisas. Hay tantos que Me consideran como a un verdugo, como a un Juez inexorable.
"Quiero ser vuestro dulce y cordial Amigo.
¡Qué no haría Yo por los que quieren darme su abandono, un abandono como de niños!"
En el metro: "Háblame, háblame..."