Viernes, 22 de noviembre de 2024

Religión en Libertad

Blog

Mártires en el solar de mi parroquia

Mártires en el solar de mi parroquia

por Un alma para el mundo

            Mi parroquia, que es muy joven, la edificamos sobre tierra de mártires. Este lugar se llamaba antes “Campo del Tiro”, y en él fueron martirizados muchos sacerdotes y religiosos de esta Diócesis de Cartagena. Cada día me acuerdo en la Misa que  celebro que, no hace tantos años, hermanos nuestros dieron la vida por la fe en este lugar. Me encomiendo a ellos, y rezo por los autores materiales de aquella matanza.

            No tengo el más mínimo rencor. Me acuerdo de aquellas palabras de Jesús en la Cruz: “Padre, perdónales, que no saben lo que se hacen”.  Ciertamente en muchos de ellos había odio contra Dios y la Iglesia, pero en otros lo que había era una incultura supina que les llevaba a convertir en chivo expiatorio de todos los males a los que no les iban a plantar cara. Y los mártires fueron cayendo en este “Campo del Tiro” en noches oscuras, en las que solo se oía el griterío de los piquetes. La mayoría unos  “mandaos”  que no sabían más que lo que les habían inculcado.

            Pero en ellos, aunque lo disimularan, había un corazón. Hace unos días un feligrés ya mayor me enseñó un crucifijo desgastado por el tiempo y los besos llenos de fe. Me dijo que se lo dio un día uno de los que formaran piquetes en el “Campo del Tiro” diciendo: “Mire, yo en el fondo no era como ellos. Este crucifijo me lo entregó un sacerdote antes de caer muerto por las balas. Me dijo: -Como veo que eres buena persona, a ti de regalo lo mejor que tengo, mi crucifijo”. Una reliquia de valor sobrenatural. Yo la cogí y la besé. Y me encomiendo a ese sacerdote, y pido por aquel buen hombre que tal vez hizo lo que no quería hacer.

            En la Misa de Beatificación de cientos de mártires celebrada hace unos días en Tarragona, a mí no se me ocurrió pensar en los verdugos, sino en aquellos que dieron su vida por amor a Dios, gritando con mucha fe “¡Viva Cristo Rey!”, y me encomendé a ellos. Fue un día de gozo para la Iglesia, que sabe siempre perdonar, porque en ella no cabe la ideología y la revancha.  Recordé aquella frase de San Josemaría Escrivá que dice: “Hay que unir, hay que comprender, hay que disculpar. No levantes jamás una cruz sólo para recordar que unos han matado a otros. Sería el estandarte del diablo. La Cruz de Cristo es callar, perdonar y rezar por unos y por otros, para que todos alcancen la paz” (“Vía Crucis”. Rialp, pág. 182).

            ¿No es esto lo que está predicando a diario el Papa Francisco? La fe no es una ideología. La fe es amor, paz, preocupación por todos. Y esto se consigue por la oración. Por eso cada tarde que celebro la Eucaristía sobre el “Campo del Tiro”, me encomiendo a los mártires, y rezo por los que, sin saber lo que se hacían, les dieron muerte. Una muerte que les ha llevado a los altares. 

            Me acuerdo la emoción que tuve al desenterrar los restos mortales de un sacerdote mártir para llevarlos a su parroquia natal, de la que yo era párroco. Era como tocar un poco el cielo. Y lo colocamos en un digno lugar como testimonio permanente de una fe vivida con valentía. Esa fe que debemos tener, aunque nos cueste llevar la cruz del desprecio, la indiferencia, o la persecución. Recordamos aquellas palabras de Jesús: “El que da la cara por mí ante los hombres, Yo la daré por él ante mi Padre celestial”. Es bonito. Vale la pena.

            Que los mártires intercedan  ante Dios para que no nos cansemos de vivir la fe con valentía y constancia, y salgamos al encuentro de los que siguen negando a Dios porque no saben más. Dios nunca nos niega a nosotros y nos espera con unos brazos abiertos  para darnos el abrazo del perdón, como el padre del hijo pródigo.

Juan García Inza   

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda