El riesgo de una pastoral carente de significado
El riesgo de una pastoral carente de significado
por Duc in altum!
Es preocupante la realidad de la pastoral juvenil latinoamericana, pues la mayoría de los coordinadores no están preparados, incluso llegan a ser personas antisociales y lejanas a la realidad. ¿Puede alguien que vive en una espiritualidad evasiva acompañar a los jóvenes en el descubrimiento de su vocación? La respuesta es no. Se necesita formar a los que forman para marcar un cambio y crear espacios significativos. Lo anterior, tiene que ver hasta con la manera de promover las actividades que se vayan a tener. Subir a Internet un video mal hecho y con imágenes deprimentes, no dará resultado. Dios ayuda, pero también quiere valerse de nuestra creatividad.
¿En qué ha quedado la pastoral? En tomarse fotografías con los sacerdotes y las religiosas que participan en los eventos, como si fueran personas venidas de otro planeta. Se están formando jóvenes miedosos e ignorantes en lo que se refiere a la doctrina de la Iglesia, de hecho, no saben cómo defenderla ante los que piensan diferente, al grado que muchos grupos juveniles se han convertido en una especie de gueto, es decir, encerrados en las parroquias, cuando la idea es salir al encuentro de la vida, de las personas, de los problemas, de las circunstancias. La pastoral no puede ser una imitación de las Iglesias protestantes, pues pierde originalidad. El 80% de los cantos y dinámicas vienen de ellas. Hay que respetar la libertad religiosa, pero no se trata de alabar a Dios brincando todo el tiempo, sino de formar hombres y mujeres críticos, capaces de relacionarse con el mundo, de asistir a una fiesta, de participar en un equipo de fútbol, de involucrarse en la política.
¿Cómo recuperar significatividad? Trabajando una pastoral que no consista en dibujar consignas, sino en poner sobre la mesa temas de actualidad y, desde ahí, dar un mensaje positivo. Los grupos juveniles corren el riesgo de volverse espacios de antisociales y eso no es sano. Tienen que ser un soporte, sin embargo, la idea es que salgan y ocupen el lugar que les corresponde en la Iglesia y en el mundo. Como decía Santa Teresa de Ávila y con eso termino: “De devociones absurdas y santos amargados, líbranos, Señor”.