Comunicado sobre la ordenación ilegítima en China
El Vaticano reacciona con firmeza por la ordenación episcopal ilegítima realizada por Pekín
Lei Shiyin no es reconocido como obispo y ha sido privado de la autoridad de gobernar a la comunidad católica. Los obispos consagrantes recibirán graves sanciones.
A través de un comunicado hecho público hoy lunes sobre la ordenación ilegítima del sacerdote Pablo Lei Shiyin como obispo de Leshan (China), el pasado 29 de junio, la Santa Sede da conocer que ha privado al sacerdote de la autoridad de gobernar a la comunidad católica diocesana al no reconocerlo como obispo e informa que los obispos consagrantes se han expuesto a "graves sanciones canónicas".
En la declaración vaticana se señala que Lei Shiyin "había sido informado desde hacía tiempo de que no podía ser aceptado por la Santa Sede como candidato episcopal, a causa de motivos comprobados y muy graves".
Antes de expresar que esta ordenación ilegítima "ha entristecido profundamente al Santo Padre", el comunicado señala que tal acto "ha sido un acto unilateral, que siembra división y, por desgracia, produce heridas y tensiones en la comunidad católica en China".
Declaración de la Santa Sede
Ordenación Episcopal en la diócesis de Leshan (Provincia de Sichuan, China Continental)
Respecto a la ordenación episcopal del Rev. Pablo Lei Shiyin, que tuvo lugar el pasado 29 de junio y que fue conferida sin el mandato apostólico, se precisa cuanto sigue:
1) El Rev. Lei Shiyin, ordenado sin mandato pontificio y por tanto ilegítimamente, está privado de la autoridad de gobernar a la comunidad católica diocesana, y la Santa Sede no lo reconoce como obispo de la diócesis de Leshan. Siguen firmes los efectos de la sanción en la que él incurrió por la violación de la norma del cánon 1382 del Código de Derecho Canónico. El propio Rev. Lei Shiyin había sido informado desde hacía tiempo de que no podía ser aceptado por la Santa Sede como candidato episcopal, a causa de motivos comprobados y muy graves.
2) Los Obispos consagrantes se han expuesto a las graves sanciones canónicas, previstas por la ley de la Iglesia (en particular por el cánon 1382 del Código de Derecho Canónico; cfr Declaración del Consejo Pontificio para los textos legistativos del 6 de junio de 2011).
3) Una ordenación episcopal sin mandato pontificio se opone directamente al papel espiritual del Sumo Pontífice y daña la unidad de la Iglesia. La ordenación de Leshan ha sido un acto unilateral, que siembra división y, por desgracia, produce heridas y tensiones en la comunidad católica en China. La supervivencia y el desarrollo de la Iglesia pueden tener lugar sólo en la unión a aquel al que, en primer lugar, está confiada la propia Iglesia, y no sin su consenso, como en cambio ha sucedido en Leshan. Si se quiere que la Iglesia en China sea católica, se deben respetar la doctrina y la disciplina de la Iglesia.
4) La ordenación episcopal de Leshan ha entristecido profundamente al Santo Padre, el cual desea hacer llegar a los amados fieles en China una palabra de aliento y de esperanza, invitándoles a rezar y a estar unidos.
En el Vaticano, 4 de julio de 2011
En la declaración vaticana se señala que Lei Shiyin "había sido informado desde hacía tiempo de que no podía ser aceptado por la Santa Sede como candidato episcopal, a causa de motivos comprobados y muy graves".
Antes de expresar que esta ordenación ilegítima "ha entristecido profundamente al Santo Padre", el comunicado señala que tal acto "ha sido un acto unilateral, que siembra división y, por desgracia, produce heridas y tensiones en la comunidad católica en China".
Declaración de la Santa Sede
Ordenación Episcopal en la diócesis de Leshan (Provincia de Sichuan, China Continental)
Respecto a la ordenación episcopal del Rev. Pablo Lei Shiyin, que tuvo lugar el pasado 29 de junio y que fue conferida sin el mandato apostólico, se precisa cuanto sigue:
1) El Rev. Lei Shiyin, ordenado sin mandato pontificio y por tanto ilegítimamente, está privado de la autoridad de gobernar a la comunidad católica diocesana, y la Santa Sede no lo reconoce como obispo de la diócesis de Leshan. Siguen firmes los efectos de la sanción en la que él incurrió por la violación de la norma del cánon 1382 del Código de Derecho Canónico. El propio Rev. Lei Shiyin había sido informado desde hacía tiempo de que no podía ser aceptado por la Santa Sede como candidato episcopal, a causa de motivos comprobados y muy graves.
2) Los Obispos consagrantes se han expuesto a las graves sanciones canónicas, previstas por la ley de la Iglesia (en particular por el cánon 1382 del Código de Derecho Canónico; cfr Declaración del Consejo Pontificio para los textos legistativos del 6 de junio de 2011).
3) Una ordenación episcopal sin mandato pontificio se opone directamente al papel espiritual del Sumo Pontífice y daña la unidad de la Iglesia. La ordenación de Leshan ha sido un acto unilateral, que siembra división y, por desgracia, produce heridas y tensiones en la comunidad católica en China. La supervivencia y el desarrollo de la Iglesia pueden tener lugar sólo en la unión a aquel al que, en primer lugar, está confiada la propia Iglesia, y no sin su consenso, como en cambio ha sucedido en Leshan. Si se quiere que la Iglesia en China sea católica, se deben respetar la doctrina y la disciplina de la Iglesia.
4) La ordenación episcopal de Leshan ha entristecido profundamente al Santo Padre, el cual desea hacer llegar a los amados fieles en China una palabra de aliento y de esperanza, invitándoles a rezar y a estar unidos.
En el Vaticano, 4 de julio de 2011
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