La herencia de la Revolución Rusa
por Enrique Chuvieco
Resulta muy difícil encontrar a lo largo del siglo XX un acontecimiento tan influyente como la Revolución Rusa. Se puede equiparar en importancia e influencia al descubrimiento de América o a la caída del Imperio Romano de Occidente. Los revolucionarios no solo consiguieron derrumbar la centenaria monarquía zarista, sino que también instauraron un régimen comunista que luego resultó determinante en el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial y de la guerra fría.
En 2017, con motivo del centenario de esta revolución, el mundo académico fue testigo de un debate encarnizado entre historiadores y politólogos de diverso signo ideológico sobre la conveniencia y la viabilidad del comunismo. Mientras que unos opinaban que falló la aplicación de una doctrina correcta y viable, otros rebatían diciendo que el comunismo nunca ha constituido una opción real de desarrollo, puesto que las ideas marxistas no son más que quimeras.
Esta enconada discusión ha provocado multitud de artículos periodísticos y académicos, ensayos y libros que analizan la Revolución Rusa desde múltiples perspectivas. Es tal la confusión generada en el lector, que desde la editorial Digital Reasons se decidió publicar un libro sobre la Revolución para resumir de una forma didáctica y altamente entretenida este acontecimiento histórico.
Es así como vio la luz La herencia de la Revolución Rusa. Este ensayo, escrito por el catedrático de Filosofía del Derecho Vladimir Lamsdorff-Galagane, no pretende teorizar sobre la viabilidad del comunismo ni sobre la supuesta paranoia de Stalin. Tampoco intenta convencer al lector para que adopte una postura frente al marxismo- leninismo. Su único propósito consiste en resumir de una forma mordaz y amena los hechos que precipitaron la Revolución, así como las devastadoras consecuencias económicas, sociales, culturales y religiosas que provocó el comunismo.
Lamsdorff nos propone un relato interesante, combinando cifras, estadísticas y datos, con nombres concretos, anécdotas, personajes macabros y héroes anónimos. Hay una tesis que se reproduce a lo largo del ensayo: la falta de libertad, incluso aunque sea en la búsqueda de una mayor justicia, acaba por ahogar al ser humano, provocando auténticas barbaries.
El libro arranca con la descripción de los hechos que precipitaron la Revolución en Rusia, describiendo las consecuencias inmediatas de la misma y la llegada de Lenin al poder. A partir de ahí, el autor estructura su relato en cinco bloques. En cada uno de estos bloques se describen las políticas sociales, económicas y culturales lanzadas por los cinco grandes jerarcas soviéticos: Lenin, Stalin, Kruschev, Brezhnev y Gorbachov. También se analizan las consecuencias de las políticas soviéticas en la población civil.
¿Cuáles son las aportaciones de este libro al género historiográfico de la Revolución Rusa? A mi juicio, el autor consigue dos logros importantes. En primer lugar, el libro contiene numerosas anécdotas, datos o historias que suelen ser ignoradas en los grandes documentos historiográficos y que resultan importantes para dotar al lector de una perspectiva rica en matices. En segundo lugar, Vladimir utiliza un lenguaje ameno y sencillo, en un intento por trazar un relato mucho más didáctico y cercano al gran público.
Por todo esto, el libro resultará de gran interés tanto para los académicos que quieran completar y contrastar sus propios conocimientos sobre el tema como para el público en general que quiera acercarse de forma sencilla y entretenida a la Revolución Rusa y al comunismo.
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