Miércoles, 25 de diciembre de 2024

Religión en Libertad

¿Queremos solucionar el problema del aborto?

Recién nacido agarra el dedo de su madre.
La abrumadora mayoría de los aborto se hacen, acogiéndose a la ley, sin explicación alguna. Foto (contextual): Nathan Dumlao / Unsplash.

por José F. Vaquero

Opinión

Hace pocas semanas conocimos la triste cifra de los abortos notificados el pasado año 2021 en España: 90.189. Un dato preocupante, que refleja un hecho frecuente en las mujeres que se quedan embarazadas. Uno de cada cinco embarazos termina en un aborto quirúrgico, más exactamente, el 21,08 % de los 427.509 embarazos. Aumenta la frecuencia, aunque ello no significa que sea algo normal, es decir, realizado según una de las normas básicas de todo ser humano: cuidar la vida, sobre todo de los más débiles y vulnerables.

Se han publicado diversos análisis de los datos, tanto en publicaciones sanitarias y de bioética como en otras publicaciones. Y en todas ellas queda claro que la situación es preocupante. Un dato ha llamado mi atención, sobre todo porque refleja las intenciones y motivaciones del ser humano, de la mujer que toma esta decisión, y también de los varones y mujeres que orbitan alrededor de una embarazada: padres, médicos y sanitarios, amigos, etc. Más de 82.000 de estas mujeres tomaron esta decisión “porque sí”, o al menos eso reflejan los datos publicados por el Ministerio. Decisión de la mujer, sin mayor explicación ni motivación.

Todos, proabortistas y provida, e incluso los indiferentes ante este tema, coinciden en que el aborto no es la mejor opción, ni la más deseable. Genera problemas para las mujeres, de modo inmediato y a medio o largo plazo. Existen una serie de efectos secundarios, que unos minimizan y otros intentan sacar a la luz. Ocasiona un gasto considerable para las arcas públicas y además reduce el principal capital del país, sus hombres. Genera muchos problemas de gestión, objetores, desacuerdos profesionales, y un largo etcétera.

Existe un problema, pero no tengo claro que en muchos ámbitos se quiera arreglar. Cuando algo falla, un buen ingeniero analiza las posibles causas, investiga en los datos y en el cambio de datos para dar con el problema. Y una vez analizado a fondo el problema, plantea las posibles soluciones. Pero si la motivación principal, abrumadoramente mayoritaria, es que aborto “porque he decidido abortar”, poco podemos analizar y mejorar. ¿O será que no interesa afrontar y solucionar este “problema”?

Sin identificar el porqué, el problema se perpetúa, y corremos el riesgo de que se enquiste y se gangrene, extendiéndose así al resto del cuerpo de la sociedad. Si tenemos fiebre, sobre todo si es alta, nos preocupamos, vamos a urgencias. Y a los médicos no les va a interesar directamente la fiebre; les preocupa, y hacen bien, conocer qué está ocasionando esa fiebre alta. El cuerpo del paciente tiene un problema serio y hay que buscar de dónde viene, la causa del problema. Y localizada la causa, podremos influir en el efecto.

En España hay distintos grupos que conocen estos datos “a pie de calle”, es decir, hablando con las mujeres que están a punto de entrar a un abortorio. Y saben, por experiencia, que la motivación que empuja a una mujer a abortar no es principalmente “porque sí, porque así lo decido”. Saben que hay muchos problemas detrás (soy demasiado joven y mis padres me han echado de casa, no tengo trabajo o dinero, estamos pasando un momento difícil en el matrimonio, tengo miedo...). Pero también saben que, en muchos casos, a veces sin saberlo, están esperando a que alguien les ayude, les eche una mano, les anime. ¿Qué necesitas para no abortar? Ese sí es un modo práctico y concreto de afrontar el problema; y en muchas ocasiones, además, un modo de solucionarlo y de devolver la alegría a esa mujer, o a esos padres, o a ese padre que ni siquiera sabe que van a acabar con la vida de su hijo, ya vivo en el seno de su novia o su mujer. A problemas concretos, soluciones concretas, a problemas genéricos, “soluciones” etéreas, que además no arreglan nada.

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda