Marcelo Van, Apóstol del Amor Misericordioso para estos tiempos
por Álvaro Cárdenas
Dios tiene un plan maravilloso para nuestro tiempo y nos lo ha ido revelando a través de almas muy sencillas y humildes. Aunque la Misericordia de Dios fue revelada muy claramente por Dios en la Biblia y siempre ha estado presente en la Iglesia, debido a la tibieza de los cristianos no ha sido suficientemente comprendida, celebrada ni exaltada.
La gran Obra de la Misericordia
Con Santa Teresita del Niño Jesús empezó a descubrirse el Amor Misericordioso de Dios y el camino evangélico de la infancia espiritual. Ella nos sumerge, con una gran sencillez y una confianza audaz, fruto de una madurez espiritual sorprendentes, en el núcleo mismo del Evangelio: la humildad y la confianza en el Amor Misericordioso de Dios. El Señor detesta el pecado, pero se vuelve con gran misericordia hacia el pecador. Los brazos de Dios están siempre extendidos hacia el hombre, pero nuestro orgullo nos impide acercarnos a Él y dejarnos abrazar por Él. “Si no cambiáis y os hacéis como niños no entraréis en el Reino de los cielos” (Mt 18, 3).
Es larga la lista de almas a las que el Señor va anunciando su Obra. Con Santa Faustina Kowalska, culmina como broche de oro esta Obra, con la revelación del misterio de la Divina Misericordia y la petición de la Fiesta de la Divina Misericordia. Entre estas almas destacan Sor Benigna Consolata Ferrero (1885-1916), Sor María Consolata Betrone (1903-1946), Sor Josefa Menéndez (1890-1923), Gabrielle Bossis (1874-1950).
Marcelo Van, un alma elegida del Extremo Oriente
Entre esas almas elegidas está también Marcelo Van, el joven redentorista vietnamita a quien el Señor escogió, y a través de un diálogo íntimo y fecundo con él, primero con Santa Teresita del Niño Jesús y también con la Virgen, lo condujo a la cumbre del Amor, como tiempo antes lo había hecho con Santa Teresita del Niño Jesús.
Hermano Marcelo Van (1928-1959), religioso redentorista vietnamita.
Al inicio de sus encuentros con sus interlocutores divinos, Santa Teresita del Niño Jesús, que es la primera en visitarle, le revela una misión que Jesús le ha pedido que le comunique y que él tendrá que cumplir: ser su secretario, el secretario de su Amor Misericordioso. En este primer diálogo con él, Teresita le dice: «Jesús quiere que las lecciones de Amor que me ha enseñado en lo secreto de mi alma se perpetúen en este mundo. Por eso se ha dignado escogerte como pequeño secretario para ejecutar el trabajo que desea confiarte. Pero antes de escogerte, ha querido este encuentro para hacerte conocer por mí tu hermosa misión» (Autobiografía, 590).
Es la propia Santa Teresita del Niño Jesús quien en noviembre de 1942, a través de un diálogo interior con él, le comunica su vocación: ser como ella, en una vida oculta, apóstol del Amor por la oración y el sacrificio. Van tiene catorce años y medio. Le dice Teresita: «¡Hermanito, alégrate! Sé feliz de haber sido incluido entre los apóstoles del Amor ¡Están escondidos en el Corazón de Dios, y vienen a ser la fuerza vital de los apóstoles misioneros! ¡Oh, Van! ¿Habrá una felicidad mayor que esta?» (Autobiografía, 651).
Apóstol del amor de Jesús por sus Coloquios y por su fidelidad religiosa
Marcelo Van es Apóstol del Amor de Jesús por la redacción de los Coloquios y por su fidelidad a la vida religiosa. Es así como Marcelo Van da testimonio del amor que Jesús le revela y del que Jesús revela a través de sus Coloquios. La ofrenda de su vida, en fidelidad a sus votos religiosos, será el modo como fecundará su misión de Secretario de Jesús.
Van forma parte de este ejército de apóstoles de su Amor Misericordioso.
El mismo Jesús es quien anuncia a Van la formación de un ejército de apóstoles cuyo papel será el de amarle como lo ama él. Cada uno de esos apóstoles será, de esa manera, «Apóstol del amor de Jesús». Este ejército será compuesto por pequeñas almas. ¿Y quiénes son estas pequeñas almas? Son -le dice Jesús- las «que se abandonan totalmente a mi voluntad y no consienten alejarse nunca de Mí» (Coloquios, 13).
El Reino de Amor de Jesús que salvará al mundo a punto de ser destruido
En un diálogo suyo con la Virgen, ella le habla del Reino del Amor de Jesús: «Jesús quiere restablecer en este mundo el Reino de su Amor. Es a través del lazo del amor como quiere restablecer la unidad en el mundo, y hacer así del mundo un reino que le pertenezca solo a Él. El Reino de su Amor será como una columna de fuego que sostendrá al mundo a punto de ser destruido» (Coloquios, 259).
Jesús le enseña que su hermana Teresita es el Apóstol universal de los otros Apóstoles de su Amor (cfr. Coloquios, 388).
Marcelo Van, profeta de esperanza
El cardenal Francisco Nguyen Van Thuan, en el prólogo de la Autobiografía del joven redentorista vietnamita, se admira de este joven y del misterio de la gracia en él: "Hemos visto como el Señor condujo a Marcelo Van y permitió que fueran minuciosamente recogidos detalles sobre su vida, en condiciones casi imposibles. Prefiero dejarles descubrir personalmente, […] el misterio de la gracia, del amor de Dios actuando en un alma muy humilde, muy pequeña, para hacer de él su instrumento en la transmisión de su mensaje, el mensaje del Evangelio y de la Esperanza".
Lámpara del Amor Misericordioso de Jesús para nuestro tiempo marcado por el sufrimiento
Los escritos del joven vietnamita iluminan las necesidades del mundo de hoy ante su rechazo de Dios, su modo de resolver los conflictos, y el dolor y sufrimiento que provocan. A través de su vida y de sus escritos se revela el amor y la fidelidad de Dios por nosotros los hombres, que nos muestra un camino hacia la alegría y la paz, en medio de la destrucción y del dolor que asedian nuestro mundo.
El cardenal Van Thuan recuerda también el valor de los escritos de Marcelo Van, que supo transformar el sufrimiento en felicidad: "Llaman la atención sobre la situación y necesidades de nuestro mundo actual, a través de la experiencia de un muchacho del Vietnam del Norte, que da testimonio de su esperanza siguiendo a Teresita del Niño Jesús. Toda su vida supo transformar el sufrimiento en alegría, tanto durante su infancia difícil, como durante su vida de religioso Redentorista, ofrecida hasta la muerte".
Nueva página web dedicada a Marcelo Van
Los Amigos de Van en España acaban de publicar una página web para presentar su vida y su misión. Quienes quieran conocer a este apóstol del Amor Misericordioso, encontrarán en ella una semblanza de su vida, una síntesis de su mensaje e información sobre las obras de Marcelo Van, publicadas o en proceso de publicación, escritos de teólogos y de otras personalidades eclesiales sobre su mensaje, y artículos sobre él.
Pincha aquí para acceder ahora al portal de los Amigos de Van en España.
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