Misa a los pies del emblemático Cerro Cubilete
El Papa entusiasma a los mexicanos y revitaliza su fe con un fuerte llamamiento a la evangelización
Antes cientos de miles de asistentes, alienta a resistir a la «tentación de una fe superficial y rutinaria» para «superar el cansancio de la fe y recuperar la alegría de ser cristianos».
El Papa ha pedido resistir a la "tentación de una fe superficial y rutinaria" para "superar el cansancio de la fe y recuperar la alegría de ser cristianos, de estar sostenidos por la felicidad interior de conocer a Cristo y de pertenecer a su Iglesia", durante la homilía de la Misa presidida en el Parque Bicentenario de León, México.
Esta alegría, según ha dicho, servirá para servir a Cristo en las situaciones agobiantes de sufrimiento humano. Concretamente, el Papa ha recordado la misión continental, que se está llevando a cabo diócesis por diócesis en este continente y que tiene precisamente el "cometido de hacer llegar esta convicción a todos los cristianos y comunidades eclesiales" para donar "la alegría para servir a Cristo en las situaciones agobiantes de sufrimiento humano, para ponerse a su disposición, sin replegarse en el propio bienestar".
Junto al Santo Padre, han celebrado 250 entre cardenales, obispos de México y los presidentes de las 22 conferencias episcopales de América Latina y el Caribe así como otros obispos de todo el continente Americano, así como 3 mil presbíteros. Al inicio de la Celebración Eucarística de este V domingo de cuaresma, el Arzobispo de León, monseñor José Guadalupe Martín Rábago, ha dirigido un saludo al Papa y ha recibido del Pontífice en regalo un Mosaico de Cristo Rey para colocar al interno del Santuario del Cubilete.
Benedicto XVI ha citado la V Conferencia General del CELAM de 2007 en Aparecida, Brasil en la cual los obispos de Latinoamérica y el Caribe "han sentido con clarividencia la necesidad de confirmar, renovar y revitalizar la novedad del Evangelio arraigada en la historia de estas tierras, desde el encuentro personal y comunitario con Jesucristo, que suscite discípulos y misioneros".
Refiriéndose a la vida de los santos, el Pontífice ha señalado que en su corazón hay "una apuesta incondicional por Cristo, de quien habían aprendido lo que significa verdaderamente amar hasta el final".
El Papa ha recordado a la Virgen de Guadalupe -Patrona de las Américas- y al indio san Juan Diego, el pontífice ha citado el poema nahuatl del Nican Mopohua que describe a Jesús "no como a un héroe portentoso de leyenda, sino como al verdaderísimo Dios, por quien se vive, al Creador de las personas, de la cercanía y de la inmediación, del Cielo y de la Tierra".
Referencias a Juan Pablo II
Además, el Santo Padre ha evocado de nuevo a su predecesor el beato Juan Pablo II al haber visto el monumento de Cristo Rey en lo alto del Cubilete por la mañana desde el helicóptero y refiriéndose al Papa polaco ha afirmado que a pesar de que "deseó ardientemente, no pudo visitar este lugar emblemático de la fe del pueblo mexicano en sus viajes a esta querida tierra". Por ello, ha añadido, "seguramente se alegrará hoy desde el cielo de que el Señor me haya concedido la gracia de poder estar ahora con ustedes". En este sentido, ha subrayado que el "poder" de Cristo Rey no consiste en "sus ejércitos para someter a los demás por la fuerza o la violencia" sino que se funda en "el amor de Dios que él ha traído al mundo con su sacrificio y la verdad de la que ha dado testimonio".
El Papa ha invitado a la preparación profunda de la Semana Santa -que es la próxima semana- donde la Iglesia celebra el misterio de la pasión, muerte y resurrección del Señor porque este tiempo "ayuda a mirar muy dentro del corazón humano, especialmente en los momentos de dolor y de esperanza a la vez, como los que atraviesa en la actualidad el pueblo mexicano y también otros de Latinoamérica".
Al finalizar, Benedicto XVI ha recordado el Año de la Fe que ha convocado para toda la Iglesia que "es una invitación a una auténtica y renovada conversión al Señor, único Salvador del mundo". Asímismo, ha invocado a la Virgen María para que "siga acompañando y amparando a sus queridos hijos mexicanos y latinoamericanos, para que Cristo reine en sus vidas y les ayude a promover audazmente la paz, la concordia, la justicia y la solidaridad".
Por la mañana, antes de dirigirse al Parque Bicentenario, el Papa se ha encontrado con el gobernador del Estado de Guanajuato, Juan Manuel Oliva Ramírez y del alcalde del municipio de Silao, Juan Roberto Tovar Torres, que le ha entregado las llaves de la ciudad, al llegar, el Papa ha dado un recorrido panorámico entre los fieles que se encuentran en el Parque Bicentenario con capacidad de 500.000 personas.