El obispo chino de Wenzhou lleva 7 meses desaparecido, su antecesor pasó 22 años encarcelado
Fieles de la Diócesis de Wenzhou, China, han empezado una campaña de oración por su Obispo, monseñor Pietro Shao Zhumin, quien permanece detenido desde el 18 de mayo como parte de las presiones de las autoridades para obligarlo a registrarse en la Asociación Patriótica. El prelado parece hallarse en prisión domiciliaria con una familia católica en Xining, a unos 2.500 kilómetros de distancia de su Diócesis, según informó Gaudium Press. La situación no es nueva para los católicos fieles al Papa y a la Iglesia de Roma, pues ya el anterior obispo de Wenzhou, fallecido el año pasado, monseñor Vicente Zhu Weifang, pasó 16 años de su vida en un campo de trabajo forzoso y luego estuvo encarcelado otros 6 años.
"No le permiten regresar a la Diócesis. Como necesita algunos meses de convalecencia, la diócesis ha negociado con las autoridades para que monseñor Shao pueda vivir en el hogar de una familia de Wenzhou (transferida a Xining) para recibir el tratamiento necesario", indicó una fuente local reservada a AsiaNews. "Mientras tanto, algunos policías de seguridad y representantes de la Oficina de Asuntos Religiosos de Wenzhou también están en Xining para vigilarlo".
El motivo de la detención del prelado es su resistencia a pertenecer a la llamada "Iglesia oficial", que se caracteriza por acatar cuatro lineamientos fundamentales: la adhesión al principio de independencia de la Santa Sede, el apoyo a la autonominación y auto elección de obispos, la concelebración de ceremonias religiosas con obispos ilegítimos (y por tanto en situación de excomunión) y la sumisión a las nuevas regulaciones religiosas que en entrarán en vigor en el mes de febrero.
"Las perspectivas de su liberación no parecen buenas. Todos en la Diócesis están preocupados y es por eso que comenzamos este mes de oración", explicó la fuente local. "Orar es el deber de todo católico y esta campaña de oración es voluntaria. No presionamos a las autoridades, sino que solo esperamos que a través de nuestra oración y ayuno nuestro obispo pueda regresar a casa, sano y salvo".
Las parroquias subterráneas de Wenzhou celebraron vigilias de oración y convocaron a una jornada de ayuno por el bienestar y pronta libertad del prelado. Además se instituyó el día 18 de cada mes como día de oración por el Obispo, con ofrecimiento de la Adoración al Santísimo Sacramento y la Eucaristía.