«Las casas que tenemos en República Centroafricana están llenas de balazos», relata un capuchino

A principios de febrero fue atacada por rebeldes islamistas la comuidad de los capuchinos en República Centroafricana. En Bocaranga, ciudad en la que se encuentran estos religiosos, han muerto 18 personas aunque en la casa de los capuchinos únicamente han agredido y robado.

De visita en España, el consejero General de los Capuchinos para América Latina, Haití y la Península Ibérica y Secretario de Animación Misionera de la orden, el peruano Hugo Mejía, ha estado viendo las casas de los religiosos y la agencia SIC recoge lo sucedido así como la persecución a los cristianos:

- ¿Cuáles son las últimas noticias sobre la masacre?

- Los rebeldes entraron a la ciudad y atacaron varios lugares. También la casa de las Hermanas de la Caridad, donde lograron refugiarse con alrededor de 200 mujeres y niños. En nuestra casa no han matado a nadie, pero se han llevado computadoras y han maltratado a la gente. La situación en la ciudad ha sido más dramática, porque han matado a 18 personas.

- ¿Quiénes son estos rebeldes?

- Las tres casas de las que disponemos en la República Centroafricana están llenas de huecos de bala, porque se han convertido en zonas de refugio tanto para los musulmanes como para los cristianos, porque ambos grupos son perseguidos por los islamistas que quieren convertir a toda la República Centroafricana en un estado islámico. Son facciones del ISIS o de Al Qaeda.

- ¿Persiguen a los cristianos?

Matan sobre todo a los cristianos y éstos a su vez se vengan de los musulmanes. Se generan grandes conflictos entre ellos. Como viven en una situación dramática, al final los ciudadanos buscan refugio en nuestras casas o comunidades. Los rebeldes entran a matar, reducen la ciudad por completo y luego se van. La población está desprotegida porque el ejército del país no le defiende. A pesar de la situación, los hermanos no han querido dejar el país y ni siquiera los Obispos se han marchado.

- ¿Ha ocurrido algo parecido en Siria?

Teníamos dos casas. Una fue arrasada y en la otra, queda un capuchino libanés. Han sido los últimos en abandonar el lugar. Primero han esperado a que salieran todos los cristianos. Ahora el problema está en el Líbano porque este país de un millón de habitantes ha acogido a dos millones de sirios. Los hermanos están ahora atendiendo a los refugiados sirios.

Hugo prosigue su viaje en el que, además de visitar las casas de la orden, dará a conocer un proyecto nuevo en el que se han embarcado: el proyecto de voluntariado laico para las misiones de Burkina Faso y Ghana en África y Assam, en el noroeste de la India. Animan al voluntariado laico a participar en los proyectos de los Capuchinos en estos lugares tan necesitados.