Los buenos y los malos pastores
por Patxi Bronchalo
Esta claro que Dios no se anda con tonterías, por eso mucho hemos hemos de hacerlo los pastores, a las ovejas no se las hace daño. Se las ayuda a ir al Cielo.
Hoy domingo del Buen Pastor me vienen a la cabeza estos versículos de Ezequiel. Tomemos nota los pastores: “¡Pastores!, esto dice el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos! ¿No deben los pastores apacentar las ovejas? Os coméis las partes mejores, os vestís con su lana; matáis las más gordas, pero no apacentáis el rebaño. No habéis robustecido a las débiles, ni curado a la enferma, ni vendado a la herida; no habéis recogido a la descarriada, ni buscado a la que se había perdido sino que con fuerza y violencia las habéis dominado. Sin pastor, se dispersaron para ser devoradas por las fieras del campo. Se dispersó mi rebaño y anda errante por montes y altos cerros; por todos los rincones del país se dispersó mi rebaño y no hay quien lo busque. Por eso, pastores, escuchad la palabra del Señor:¡por mi vida! —oráculo del Señor Dios—; porque mi rebaño ha sido expuesto al pillaje, y a ser devorado por las fieras del campo por falta de pastor; porque mis pastores no cuidaron mi rebaño, y se apacentaron a sí mismos por eso, pastores, escuchad la palabra del Señor: Esto dice el Señor Dios: Me voy a enfrentar con los pastores: les reclamaré mi rebaño, dejarán de apacentar el rebaño, y ya no podrán apacentarse a sí mismos. Libraré mi rebaño de sus fauces, para que no sirva de alimento” .
Las palabras son muy fuertes, tienen que serlo. Pero también muy consoladoras. Porque Dios se toma muy en serio el amor a su pueblo, por eso nos exhorta así, nosotros nos somos nadie para maltratar aquello que Él quiere tanto. La gravedad de las palabras habla de la importancia con que Dios se toma su Alianza. Dios se toma muy en serio vuestra salvación, por eso tenemos tanta responsabilidad en el pastoreo.
¿Y si has conocido a algún pastor que no es ejemplo? Que no hace lo que dice, que no cuida al rebaño sino que primero piensa en Él. Mira cómo continúa Ezequiel: "Yo mismo buscaré mi rebaño y lo cuidaré. Como cuida un pastor de su grey dispersa, así cuidaré yo de mi rebaño y lo libraré, sacándolo de los lugares por donde se había dispersado un día de oscuros nubarrones. Sacaré a mis ovejas de en medio de los pueblos, las reuniré de entre las naciones, las llevaré a su tierra, las apacentaré en los montes de Israel, en los valles y en todos los poblados del país. Las apacentaré en pastos escogidos (...) Suscitaré un único pastor que las apaciente: mi siervo David; él las apacentará, él será su pastor".
Jesús es el Buen Pastor. Ante nuestros malos ejemplos siempre se le puede mirar y clamar a Él. De Él nosotros aprendemos continuamente. Hermanos sacerdotes, tomémonos muy en serio estas palabras de la Sagrada Escritura, Dios nos juzgará. Y a los laicos os pido no dejéis de rezar por nosotros y de ayudarnos con ejemplos de vida santa.