La «educación de calidad en valores cristianos» es un derecho paterno, recuerda Escuelas Católicas

Con motivo de la próxima apertura del periodo de reserva de plaza escolar para el próximo curso, Escuelas Católicas Extremadura promueve desde este 28 de marzo una campaña para recordar "la responsabilidad y derecho de los padres" a la hora de escoger la educación de sus hijos. 

Bajo el lema "Mi responsabilidad, mi elección", la organización pone de manifiesto su convicción de que "son los padres quienes deben elegir el tipo de educación que creen más adecuada y qué centro es el que mejor se adapta".

La iniciativa se ha lanzado durante los días previos a la difusión desde el Vaticano del documento La identidad de la Escuela Católica, que en este sentido recuerda la obligación general de reconocer, respetar y testimoniar la identidad católica de la escuela.

Puedes leer aquí el documento completo La identidad de la Escuela Católica. 

"Esto se aplica al personal docente, al personal no docente, a los alumnos y a sus familias. En el momento de la inscripción, tanto los padres como los escolares deben conocer el proyecto educativo de la escuela católica", afirma el texto vaticano.

En consonancia, Escuelas Católicas Extremadura reclama que "padres y profesores deben estar unidos procurando una educación de calidad basada en los valores cristianos, la formación que ofrece la educación concertada católica" para asegurar el buen desarrollo de los alumnos.

Parte de la campaña de Escuelas Católicas Extremadura "Mi responsabilidad, mi elección" para recordar el derecho de los padres a escoger la educación de sus hijos.

En el documento difundido por la organización educativa, su directora de comunicación María del Socorro Fuentes ha reiterado la importancia de la educación concertada como garante de "una formación que atiende a los valores católicos que los padres intentan inculcar a sus hijos", así como el carácter personalizado y libre de la misma.

Asimismo, Fuentes destaca el compromiso de Escuelas Católicas Extremadura en "la integración de los alumnos con necesidades especiales", lo que supone uno de los principales motivos de afiliación a centros concertados.

María del Socoro concluye destacando la importancia de escoger una educación que, además de lo académico, promueva la virtud: “Los resultados académicos son muy importantes, pero no lo son todo. También queremos que nuestros alumnos sean agentes activos de mejora social guiados por la cooperación y la solidaridad”.

Escuelas Católicas

Escuelas Católicas (EC) nace en 2005 con la Unión de FERE-CECA y la patronal EyG, con la misión de unir y servir a todos los titulares de centros católicos con una vocación abierta e integradora, fortaleciendo a la escuela católica y ayudando a las entidades titulares y sus centros a desarrollar desde su identidad su papel evangelizador y educativo y defendiendo una educación que garantice la libertad, la equidad y la calidad.