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Un desafiante Krahe, juzgado por su corto «Cómo cocinar un Cristo», dice que se exiliará a Francia
Y el Gran Wyoming promueve "condenarle a que rece tres Aves Marías en lugar de la multa" de 144.000 euros.
Un Juzgado de lo Penal de Madrid juzga este lunes al cantautor Javier Krahe y a la productora Motserrat Fernández por un delito de ofensas a los sentimientos religiosos por el corto "Cómo cocinar un crucifijo para dos personas" emitido en el 2004 en el programa Lo + plus de Canal Plus.
En el vídeo se mostraba cómo el crucifijo era troceado, untado con mantequilla y metido en un horno, "saliendo al tercer día en su punto".
Tras ello, el Centro Jurídico Tomás Moro (CJTM) presentó una querella criminal por escarnio de las creencias religiosas. A Krahe y a Fernández se les impuso fianzas de 192.000 y de 144.000 respectivamente.
A la entrada del Juzgado de lo Penal de Madrid, un Krahe desafiante ha declarado que si le condenan "se exiliará a Francia".
En sus declaraciones, el sexagenario representante de la movida madrileña, dijo que seguirá haciendo canciones sobre la Iglesia, pero siempre escribirá muchas más sobre chicas que sobre temas religiosos; como una media de "nueve sobre chicas y una sobre la Iglesia".
A su llegada al juzgado, el cantautor fue recibido entre aplausos por parte de amigos como Joaquín Trincado, realizador del vídeo; el compositor y cantante Pancho Varona, Pepín Tre y el Gran Wyoming, que asistió como testigo en el juicio, entre otros.
También se encontró con el cantante Miguel Ríos, quien comentó que muestra su apoyo a la propuesta del Gran Wyoming "de condenarle a que rece tres Aves Marías en lugar de la multa" de 144.000 euros.
He venido a los juzgados, declaró Ríos a Efe, "a dar una abrazo a su amigo" pero, también, porque le parece "absurdo" el juicio ya que "cada vez volvemos más a la Inquisición y no por lo que digas ahora sino por lo que dijiste hace veinte años", refiriéndose al vídeo producido en 1978, pero emitido en 2004. El cantante subrayó que el juicio "es un sinsentido y deberíamos de tener cuidado porque no nos podemos volver todos talibanes".