Francisco consagró personalmente al nuevo auxiliar chileno: «Un obispo que no reza es un mercenario»
Francisco consagró personalmente este sábado en la basílica de San Pedro al nuevo obispo auxiliar de Santiago de Chile, el argentino Alberto Lorenzelli, de 65 años, a quien había nombrado el pasado 22 de mayo. Religioso salesiano, monseñor Lorenzelli dirigía la comunidad salesiana del Vaticano y era el capellán de la dirección de los Servicios de Seguridad y Protección Civil del Estado de la Ciudad del Vaticano.
El Papa manda así a la Iglesia chilena, en un proceso de renovación y transformación espiritual, a una persona que ha sido un miembro destacado de la Curia, con una misión que expresó durante la homilía: "Has sido elegido para los hombres, has sido constituido en las cosas que miran a Dios. En efecto, 'episcopado' es el nombre de un servicio, no de un honor, puesto que al obispo le compete servir más que dominar... El obispo es servidor, pastor, padre, hermano, jamás un mercenario".
Una palabra que el Papa volvería a utilizar inmediatamente al enumerarle sus tareas: "Anuncia la Palabra en todo momento, oportuna e inoportunamente. Advierte, reprende, exhorta con toda magnanimidad y doctrina. Y mediante la oración. No olvides que la primera tarea del obispo es la oración... Un obispo que no reza es un mercenario. Y mediante la oración y el ofrecimiento del sacrificio por tu pueblo, alcanza de la plenitud de la santidad de Cristo, la riqueza multiforme de la divina gracia".
También le recomendó, evocando el ejemplo del Buen Pastor que conoce a sus ovejas y no duda en dar la vida por ellas, "cercanía al Pueblo de Dios, conocer al Pueblo de Dios", y en particular a sus sacerdotes: "Estate muy cercano a los sacerdotes: ¡cercanísimo! Que cuando te busquen te puedan encontrar enseguida, sin burocracia, directamente. Pero también sé cercano a los pobres, a los desvalidos y a cuantos necesitan acogimiento y ayuda. Exhorta a los fieles a colaborar en la labor apostólica y escúchales de buen grado".
Por último, le animó a tener una "viva atención" a quienes "no pertenecen al único rebaño de Cristo", porque también le han sido "confiados en el Señor": "Recuerda que en la Iglesia católica, reunida en el vínculo de la caridad, estás unido al colegio episcopal y debes tener en ti la solicitud por todas las Iglesias, socorriendo generosamente a las que tienen mayor necesidad de ayuda".